El récord se lo queda Juan Casuco

José Gomes se ha propuesto romper los registros históricos de la UD Almería y rara es la semana en la que no se habla de un nuevo récord. El 5-0 de la Copa del Rey frente al Deportivo Alavés es el segundo mejor resultado del club desde que ascendió a Segunda División allá por 2002. Precisamente fue un año más tarde cuando se produjo el marcador más abultado que se recuerda en un partido oficial. Ocurrió el 31 de mayo de 2003 en el mítico Juan Rojas, un campo donde se respiraba fútbol en cada esquina. El Almería recibía al Xerez Deportivo y ganó por un contundente 6-0.

El once de Juan Martínez Casuco fue: Barbero, Ortega, César Jiménez, Manu, Cervián, Ramos, Esteban, Juanlu, Ortiz, Francisco y Bilic. Los aficionados que se dieron cita en las gradas disfrutaron de tres dobletes; uno de Ortiz Bernal y Otro de Francisco, y por último Mate Bilic.Es el resultado que hasta la fecha nadie ha podido igualar. Le sigue un 5-1 al Levante en 2005, ya en el Mediterráneo, así como otro 5-1 al Sabadell en 2013, el año del ascenso a Primera División con Javi Gracia. 

Cinco goles
Es la sexta vez que el Almería consigue cinco dianas en un encuentro oficial. Más cercanos en el tiempo están el citado 5-1 al Sabadell y 3-5 en el Anxo Carro, ante el CD Lugo, todo ello en la misma campaña 2012-2013, inolvidable para los rojiblancos, que regresaron por última vez a la máxima categoría. Por último, en 2018, ya sin opciones de Play Off con Fran Fernández en el banquillo, el equipo derrotó por 5-3 al Elche en el Mediterráneo. Aquel día Álvaro Giménez firmó tres dianas. El pasado sábado, en plena pandemia y sin público en las gradas, el nuevo Almería de Turki Al-Sheikh y José Gomes se adjudicó el segundo marcador más amplio de la historia desde que la entidad regresó a la Liga de Fútbol Profesional.

Umar Sadiq (2), Ager Aketxe, Rodrigo Battaglia (pp), y Juan Villar, de penalti, consiguieron doblegar a un Deportivo Alavés que compite en la élite del balompié. Lo realmente importante es la competición de Liga, donde se busca por la vía directa el ascenso, pero la Copa del Rey es una competición que no estorba en una plantilla de 30 profesionales. Vivir un 5-0 no es habitual y ya entra en las páginas doradas. Y lo que más ilusiona es que no se ve el techo deportivo.