Almería, en riesgo de sufrir un gran terremoto: "Puede causar daños", avisan los científicos
Expertos del CSIC descubren un sistema de fallas hasta ahora desconocido en el mar de Alborán

Simulacro de terremoto llevado a cabo en Adra.
Hace tan solo 15 días, la provincia de Almería tembló después de que un terremoto de intensidad 4,2 tuviera lugar en Alborán Norte, al sur de El Ejido. Era el segundo seísmo de cierta magnitud que afecta al territorio almeriense durante los últimos meses, ya que el 14 de julio tuvo lugar otro de 5,4 en la escala Richter que hizo temblar a la provincia como hacía años que no lo hacía.
Y los dos terremotos ocurridos en los últimos cinco meses podrían dejar de ser una excepción para convertirse en regla. Así lo han afirmado un grupo de expertos en un estudio del Instituto de Ciencias del Mar, del CSIC, que se ha publicado en la revista científica Tectonics, en el que han revelado el hallazgo de un nuevo sistema de fallas que hasta ahora era desconocido y que, aseguran, sería capaz de generar "grandes terremotos".
Fuentes sísmicas desconocidas
El riesgo es real para la provincia de Almería, ya que, desvelan los científicos, esta formación recientemente descubiera es susceptible de causar "daños en zonas cercanas". Aunque, eso sí, avisan de que no se sabe cuándo puede ser.
“Es como observar el momento en que una zona comienza a deformarse hasta convertirse con el tiempo en una falla capaz de generar grandes terremotos que podrían causar daños en las zonas cercanas”, explica Ariadna Canari (ICM-CSIC), autora principal del trabajo.
De este modo, tal y como ha desvelado esta investigación pionera, el sistema de fallas incipiente descubierto, que desvela riesgos sísmicos ocultos en pleno mar de Alborán, el sistema de fallas detectado no está "plenamente desarrollado", pero ya presenta signos de actividad y pone sobreaviso a provincias como las de Almería, ya que, aunque el mar de Alborán no es considerada una región de alto riesgo sísmico, este reciente descubrimiento indica que pueden "existir fuentes de sismicidad aún no identificadas".
¿Cuándo podría ocurrir?
Y aunque el gran terremoto podría no ocurrir en meses, ni en años, ni en décadas, el hallazgo es revelador. “Identificar su presencia y determinar sus características sísmicas puede suponer una mejora sustancial en la evaluación de la percepción del riesgo, así como en la posibilidad de generar tsunamis asociados”, apunta Hector Perea (ICM-CSIC), coautor del estudio.
Además, añade Canari: “Esta fase es muy difícil de detectar, ya que en geología los procesos actúan a escalas de miles o millones de años. Por eso, este estudio nos proporciona información clave sobre cómo crecen y se organizan las fallas dentro de la corteza terrestre”.
Un descubrimiento que, tal y como han explicado los expertos, ha sido posible gracias a la utilización de datos de muy alta resolución. "Las observaciones obtenidas con un AUV han permitido realizar un análisis morfotectónico del fondo marino con una resolución métrica, excepcional en entornos submarinos y comparable a los estudios topográficos terrestres. Es una herramienta de gran valor para estudiar sistemas de fallas activos en lugares donde las observaciones directas son imposibles", señala Sara Martínez-Loriente, coautora del estudio.