Normas “de otra época” en un colegio que impide llevar vaqueros a las profesoras

Un grupo de familiares denuncia que se trata de normas “incómodas y discriminatorias”

Imagen de archivo del Mater Asunta.
Imagen de archivo del Mater Asunta.
Álvaro Hernández
18:57 • 24 sept. 2023 / actualizado a las 22:18 • 24 sept. 2023

Tres folios compartidos con familias y profesorado con la llegada de la nueva institución que ostenta ahora la titularidad del centro educativo se suman ahora a la lista de reivindicaciones de los padres y madres descontentos con la gestión. Se trata, en concreto, de algunas familias del colegio Mater Asunta (ahora Colegio Juan Pablo II), gestionado por la Fundación Educatio Servanda.



A su llegada al centro, la institución compartió con el personal y las familias un documento al que ahora ha podido tener acceso LA VOZ y en el que “se recogen primeramente las normas de uniformidad de los alumnos y a continuación se especifica el mínimo que se espera de los profesores, las profesoras y del resto del personal del colegio”.



Las normas



En primer lugar, Educatio Servanda estipula lo habitual en un centro concertado: cómo es la uniformidad para los alumnos, tanto en la ropa para las aulas como en la equipación deportiva. 



Más allá de los colores de polos, jerseys, faldas y pantalones, la normativa se muestra tajante en las prohibiciones. Así, tanto para alumnos como para alumnas se estipula que “no se utilizarán piercings, ni adornos excesivos. No se permitirán tatuajes o similares, ni maquillajes, ni uñas decoradas”.



No obstante, lo más llamativo no se encuentra en el apartado referente a los estudiantes del colegio. La Fundación Educatio Servanda también marca, en este documento, “los mínimos de vestimenta” que la institución espera tanto de profesores como profesoras, llegando a plantear que no se utilicen prendas de vestir totalmente habitual en el día a día de cualquier ciudad occidental en pleno 2023.



Uno de los aspectos más curiosos hace referencia  al uso de pantalones por parte de las profesoras. En concreto, de pantalones vaqueros. Así, el citado documento plantea que “no se ve conveniente el uso de pantalones vaqueros, mallas o pantalones muy ajustados”.



Por si fuera poco, el documento señala que "es muy importante el cuidado de los detalles en cuanto a higiene y estética se refiere", haciendo hincapié en que "la feminidad es una cualidad destacada en la mujer que debemos potenciar".


Además, Educatio Servanda prefiere “el uso de camisas evitando transparencias, escotes pronunciados, hombros al aire, camisetas de tiras o ropas excesivamente ajustadas”. También se hacen recomendaciones respecto al calzado: “zapato, bota o botín siempre cómodo y en verano un poco abierto, pero no excesivamente”. Nada de calzado deportivo. Por supuesto, en caso de usar falda o vestido, “se ve conveniente que como mínimo baje de la rodilla”.


Todo ello, partiendo de una premisa: “Nuestra imagen y por lo tanto nuestro modo de ir vestidas importa mucho, sabiendo ir cómodas, elegantes y sencillas”, reza el documento distribuido por la institución a su llegada a la gestión del antiguo Mater Asunta.


En el caso de los profesores, el documento plantea aún mucho menos margen para la elección: “Se utilizará traje y corbata (puede ser americana), de color azul marino o gris.

Eso sí, el documento se muestra benévolo con los profesores cerca del verano: “Durante los meses de mucho calor podrá prescindirse de la americana e incluso utilizar camisa de manga corta”, concede la normativa escolar.


No obstante, fuentes cercanas al claustro aseguran que esta normativa, al menos en el caso de los profesores, se ha relajado en cierto sentido, no siendo tan estricto el uso del traje.


Colores

Tanto para profesores como para profesoras, el documento llama la atención sobre los colores a utilizar en la ropa.


“En cuanto a los colores, no se determinan”, plantea en un inicio el documento, matizando inmediatamente que “se recomienda evitar tonos chillones y usar sobre todo los tonos más típicos de los uniformes (azul marino, gris, blanco...), pues realmente queremos dar la sensación de que efectivamente llevamos una cierta uniformidad”, plantea el documento. Un grupo de padres denuncia que las normas “además de ser incómodas y de otra época son discriminatorias”.


Temas relacionados

para ti

en destaque