La leyenda del Pipo Gorosito continúa y a sus éxitos como entrenador del Alianza de Lima y gran futbolista que lo fue, se une su saga familiar donde despunta Dylan, del que se hablan maravillas en Argentina por ser internacional de la sub 20 y una de las sensaciones del Mundial. 

Solo tiene 19 años y está atado hasta 2028, pero la llamada de Europa no tardará en producirse y el camino que lleva a Almería se lo sabe de memoria su progenitor. Héctor Pérez en Diario AS destapa las virtudes del jugador y todo lo que lo rodea con una selección absoluta en pleno cambio generacional que necesita savia nueva.

Dylan Gorosito juega de lateral derecho y se ha formado en las categorías base de Boca Juniors y al cumplir los 18 años se le ponía un contrato encima de la mesa para amarrarle. Muy completo con el manejo de la pelota, no descuida la marca y se proyecta en ataque. 

Es un futbolista de solo 19 años valiente y con mucho descaro. Centrado en la cita Mundial, lo que le espera promete, ya que se abría el debate del relevo generacional en Argentina y los internacionales de base empiezan a llamar a la puerta, y uno de ellos acumula 28 partidos con la sub-17 y en la sub-20 no ha tocado techo y le queda margen de mejora.

Los Gorosito conocen bien Almería

La dirección deportiva que lidera Joâo Gonçalves siempre tiene el radar puesto en los jugadores emergentes y cuando llegan las grandes citas el seguimiento es mayor, y no estaría de más apuntar a Dylan como una apuesta de futuro. 

El caladero argentino ha dado poco desde la llegada del poder de Arabia, siendo Robertone la referencia firmado de Vélez, porque Valentín Vada llegó al Almería procedente del fútbol francés y Luka Romero cedido del Milán. 

Se habla mucho y bien del hijo del Pipo y toca estar atentos, ya que la dimensión del club de Al-Khereiji es mundial y todo lo bueno se apunta en la lista.

Boca Junior es un club duro a la hora de negociar las salidas de sus jugadores y la explosión de Dylan supone una importante revalorización. Europa es una gran tentación para los futbolistas argentinos, pero hay que pasar por caja a la hora de conseguirlos y no suelen ser baratos porque se amarran con cláusulas en dólares. Dylan Gorosito es un internacional muy seguido en Argentina porque el apellido exige y todo lo que consiga con la sub-20 será tenido en cuenta de cara a un salto que le llegará de la mano de Lionel Scaloni.

Una estrella que sigue brillando

De tal palo le viene a Dylan ya que el Pipo Gorosito también tuvo protagonismo con la albiceleste en su etapa de jugador. No llegó a disputar un Mundial, pero jugó dos Copas de América sumando 18 llamadas de su selección. Nestor Gorosito entrena en Perú al Alianza de Lima y tiene una espina clavada en España con el Almería al que llegaba tras su paso por el Xerez, y no pudo completar su obra a falta de cuatro partidos para terminar la temporada. Se adaptó a la ciudad y estaba feliz en el club, pero Alfonso García fue implacable y lo cesaba. 

No le ha faltado el trabajo desde que dejó de pertenecer a un Almería diseñado para el ascenso a Primera que acabó salvado por la campana en Córdoba con Soriano en el banquillo. Aquella salida de España la lleva marcada el entrenador que seguro vería con buenos ojos a su hijo en un club de LaLiga y si viste de rojiblanco le haría una doble ilusión. A los 61 años no cierra ninguna puerta y España siempre sigue su caminar por los banquillos y la nueva propiedad del Almería apunta a los mejores y padre e hijo se ponen en el radar de cara al futuro.