Hay que meter al Huesca en la quiniela del ascenso porque su director deportivo, Martín González, apuesta a ganador firmando a Francisco Portillo que se ha convertido en el talismán de la categoría de plata: club para el que compite, ascenso que logra. Tiene 35 años y el mejor palmarés que se recuerda para un profesional a nivel de ascensos de categoría. No se entendía otro parón como el vivido el pasado verano, cuando se quedaba sin equipo hasta que el Real Oviedo lo llamaba en noviembre y daba en la diana subiendo a Primera 20 años después.

Según la web de la Cadena SER con la firma de Luis Abadías, las gestiones han cristalizado y la SD Huesca contará con un plus de cara a la lucha por el ascenso. Casi reserva plaza en Primera a tenor de los números del malagueño que ha logrado el ascenso con Real Betis, Getafe, Almería, Leganés y Oviedo. Las cinco temporadas que ha competido en la división de plata acabaron con un ascenso, y se daba el caso en la última de ser el autor de un gol para la historia del equipo carbayón. Portillo siempre tiene quien le escriba y el Huesca ha acertado.

Un talismán que se rifan los equipos

No le ha faltado el trabajo cada temporada desde que daba sus primeros pasos en la cantera del Málaga, donde crecía hasta llegar a la primera plantilla. Curiosamente con el equipo de su ciudad no ha logrado ascender a Primera, pero todo se andará ya que tiene cuerda para seguir hasta lo 40, como Santi Cazorla con el que ha compartido vestuario en Oviedo y ha celebrado con él su último ascenso. Sabiendo que todo vale en el mundo del fútbol mejor tener en tu plantilla a Portillo si vas a luchar por el asenso a Primera.

Siempre acaba encontrando trabajo. No hay duda que tiene estrella. Este verano parecía que se iba a quedar (vestido como la novia) y al final la llamada de un aspirante al ascenso ha sido para él la mejor de las noticias. No ha parado de entrenar y tardará poco en tomar el aire a un club que conoce bien y donde luchará por lo que mejor se le da. Nadie sabe el por qué de tantos ascensos, pero “algo debe de tener el agua cuando la bendicen”, que dice el refrán, y con Portillo: sube el Huesca. No son matemáticas son realidades que se pueden contar de generación en generación: Portillo es talismán.

Una huella imborrable en el Almería

No solo es fiable de cara a un asenso el jugador malagueño, ya que su etapa en el club rojiblanco se saldaba con un ascenso y una permanencia en Primera. Algo tiene que da suerte a los clubes que lo llaman. Sale barato su contrato, porque el dinero que genera un ascenso salva la economía de los clubes la mayoría de las veces. Se le ha escapado a Rubi pedirlo para que este sea el año del regreso. Martín González sabe elegir futbolistas y estando libre Portillo hay que llamarlo para que se logre un objetivo con el que sueña el Alto Aragón.

A Portillo no le falta el trabajo pero le cuesta a los clubes tomar una decisión a tenor del pasado, y este verano. Nadie lo llamó en 2024 y ahora sobre la bocina va a formar parte de un Huesca que apunta alto en plena renovación de plantilla, tras acariciar la lucha por el Play Off. Parece que a Joâo Gonçalves esto de los jugadores talismán no le cuadran y lo ha vuelto a dejar libre, sabiendo que es un futbolista de elevado caché pero asumible para lo que se estila en el Almería.