‘Volando Voy’ enseña a todo el país la belleza y el sueño del Valle del Andarax

El programa, que ayudó a construir un vivero para reforestar la zona, se emitió este martes

Francisco G. Luque
20:11 • 02 nov. 2022

Solamente un día después de hacerlo gracias a ‘MasterChef’, que grabó una de sus pruebas de exteriores en la playa de Agua Amarga, en el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, la provincia de Almería volvió al prime time televisivo este martes. El Valle del Andarax fue protagonista del popular programa ‘Volando Voy’, de Cuatro. El helicóptero de Jesús Calleja mostró a miles de espectadores pueblos como Almócita, Fondón, Laujar de Andarax, Ohanes y Canjáyar, además de sobrevolar el ‘mar de plástico’ de El Ejido.



El medio ambiente fue el gran conector del programa, correspondiente a la octava temporada de este conocido espacio que en su momento ya pasó por otros lugares de la geografía almeriense como el Desierto de Tabernas o Calar Alto. En esta ocasión, la Plaza Mayor del Ayuntamiento de la capital de la Alpujarra almeriense, Laujar, fue el punto de encuentro de todas las personas que, de una forma u otra, formaron parte de esta experiencia con la que cientos de hogares españoles, y de otras partes del mundo, han podido conocer los encantos de estos municipios del Andarax, las vivencias de sus gentes y su lucha incansable por hacer de sus pueblos y su entorno natural, un lugar más sostenible, en el que puedan quedarse las nuevas generaciones.






Proyecto Bosque en Almócita



Calleja comenzó su visita en Almócita, donde quedó asombrado con las iniciativas del consistorio y vecinos, que han hecho que esta localidad sea considerada la cuna andaluza y nacional de la agroecología. Pero los almociteños quieren ir mucho más allá. Ahí, toma protagonismo el denominado como Proyecto Bosque, confeccionado y coordinado por Zaida Ruiz, a la que ‘Volando Voy’, con la ayuda de los paisanos de esta joven, dieron una grata sorpresa que fue el colofón final de más de una hora de emisión de un programa que fue grabado el pasado mes de mayo.



Recuperar el Bosque Mediterráneo que siglos atrás hubo en esta zona de la Alpujarra es el gran objetivo de Zaida. Ya se han plantado más de mil árboles de variedades autóctonas como algarrobo o encina, entre otras, realizando una gran labor para comenzar una reforestación que, evidentemente, tiene un coste económico: cada ejemplar cuesta unos 3 euros como mínimo. Es por ello que el programa organizó la construcción de un vivero geodésico en el que crezcan esos árboles con los que llenar de verde y de sombra el Valle del Andarax.



Calleja llamó a Klaus Jack, un constructor de domos residente en Órgiva (Granada) para encargarle hacer esta especie de invernadero de cimentación de piedra seca, de estructura prácticamente integral hecha de madera y cristal y otros materiales de cercanía y sostenibles. Tan solo había cuatro días y se pusieron manos a la obra, con la ayuda de decenas de vecinos, en una cooperación intergeneracional que dejó imágenes como la de un joven haciendo beatbox junto a una anciana cantando típicos temas de coro.





Las espectaculares imágenes aéreas enamoraron a los telespectadores, pero también las anécdotas, la alegría y emoción de los vecinos de estos rincones alpujarreños que se unieron para impulsar la idea de Zaida, un sueño que nace en Almócita con el objetivo de extenderse a otras comarcas, para plantar cara al cambio climático y dejar un mundo mejor a las futuras generaciones.


Emotivos testimonios de los lugareños

Calleja habló con las almociteñas Consuelo y Paquita, con el agricultor Matías Ruiz y su hija Zaida, a la que subió en su helicóptero para enseñarle todo el Valle del Andarax y el Campo de Dalías. El presentador habló de compostaje y escuchó las sabias palabras del alcalde Francisco García: “Ante el problema de la despoblación hay que ser imaginativos y en el mundo rural el único camino es la sosteniblidad”.


Mientras se construía el vivero geodésico, el aventurero se desplazó a Canjáyar, donde conoció a Miguel Cortés y a Esther, médico de pueblo y maestra de parvulario en otros tiempos. En Ohanes escuchó las vivencias de Joaquina, amortajadora y tendera, a la que llevó a las alturas y que emocionó, con su historia a los telespectadores. Visitó a los alfareros Carlos y Margarita y habló de agricultura con Mari Ángeles.




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