Obras en Los Molinos: “en cuanto salga el propietario, se retoman las obras”
Ya ha pasado el plazo para la marcha voluntaria del propietario de la granja agrícola que se negó a irse

Eloísa Cabrera junto a María del Mar Vázquez y Juan José Segura en el pleno
La concejal de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Almería, Eloísa Cabrera, lo tiene claro: “en cuanto salga el propietario, retomamos las obras”.
Así resumía ella el debate que se mantenía en la sesión plenaria sobre la paralización de las obras hace más de dos años para el desarrollo de un sector en Los Molinos en el que la empresa municipal de la vivienda ‘Almería XXI’ ejerce como agente urbanizador por la negativa de un propietario de una granja agrícola de abandonar su finca, a pesar de haber recibido el pago de la expropiación de este espacio.
Explicaba Cabrera en la sesión plenaria que hasta ahora no se había podido solucionar nada ya que todo estaba sometido a un procedimiento judicial. Ahora los tribunales le dan la razón a la Junta de Compensación y, según decía en el pleno, una vez que ha pasado la fecha dada para que abandone el espacio voluntariamente, le toca pedir al juzgado una fecha para proceder al desalojo de la granja. Una vez que esto pase, el compromiso municipal es retomar los trabajos lo antes posible.
Críticas Lo cierto es que los diferentes grupo municipales no se mostraron satisfechos con las explicaciones. Hay que tener en cuenta que este debate llega al plenario a través de una moción presentada por parte del Grupo Socialista que fue apoyada también por Podemos-IU-Verdes y Vox, pero que se desestimó por el voto contrario del PP.
Adriana Valverde, la portavoz del Grupo Socialista, lamentó el voto en contra del PP a una iniciativa que venía a reclamar al Ayuntamiento “que deje de mirar para otro lado, que esté encima de este proceso para que no se alargue más en el tiempo y que centre sus esfuerzos en acabar con esta situación que nunca tuvo que producirse”.
Cabe recordar que las obras que ahora están paradas tienen el objetivo de urbanizar cerca de 60.000 metros cuadrados de suelo entre el Paseo de La Pipa y la calle Rosa Chacel. Arrancaron en el mes de abril de 2022 y fue entonces cuando uno de los propietarios, exactamente el de una actividad agropecuaria, tenía que desalojar los suelos que estaban afectados tras negociar con la Junta de Compensación. Llegado el momento, el propietario decidió no abandonar la actividad desembocando en la paralización.