El nombre de Jorge Molina va ligado al fútbol almeriense de por vida y no solo por su etapa en el Poli Ejido, club al que llegaba desde el Alcoyano con su casi inseparable Juli. Ha pasado tiempo de aquella etapa que quedaba grabada a fuego por la paliza que le dieron en la Copa del Rey al Villarreal de Manuel Pellegrini en Santo Domingo, con tres goles del ahora entrenador del Arenas, Raúl Torres y Nacor. Hasta le llegó a marcar en El Madrigal como se llamaba el campo amarillo aquella temporada 2007-08. Fue Jorge Molina lo que ahora pretende en el Arenas: un maestro del ‘9’ para aquel equipo celeste que llegó a disputar hasta cinco rondas del torneo del KO y su goleada a un equipo que competía en la Champions daba la vuelta al mundo. Por años que pasen la carrera deportiva de Jorge Molina es seguida en la provincia de Almería: siempre.

Llegó a jugar pasados los 40 años en el Granada, colgando las botas y pasando al área técnica de la que se desvinculaba la presente temporada, y ahora le toca estrenar la titulación en la primera categoría nacional sin moverse de una ciudad donde ha encontrado el paraíso. Nacido en Alcoy hace ahora 43 años, comenzaba en el equipo de su ciudad antes de lanzar una gran carrera por Betis, Getafe y Granada: todos ellos de Primera a los que aportaba muchos goles. Siempre cumpliendo en el campo y ofreciendo unos números que le daban trabajo cada temporada. Pudo dilatar su carrera deportiva porque se supo cuidar, pese aquellos campos de la categoría de bronce, donde había que dar el ‘callo’ y salvar las piernas. Nadie le regaló nada.

Entrenador

El Arenas de Armilla salvaba la categoría y pretende dar un paso más en sus aspiraciones la campaña venidera. Ya lo quisieron fichar como futbolista cuando iba a dejarlo en el Granada y ha tocado que firme como entrenador, ya con las botas colgadas. En ese paso más que pretende un equipo de solera va el ADN de un Jorge Molina siempre ganador y plenamente adaptado a la ciudad de la Alhambra donde ha sido siempre muy querido por la afición. Su carrera en los banquillos comienza con un bonito reto y conocedor de la cantera del Granada, seguro que buscará futbolistas de talento para que su proyecto cumpla las expectativas. Molina siempre sale a ganar y tiene buen ojo para detectar el talento de los futbolistas. En Armilla comienza una bonita aventura.

Jugador

Lo dejaba en 2023 y todo apunta a que le quedaba cuerda para seguir una temporada más, pero quería aprender en los banquillos y ahora le toca poner el título al servicio de un club de la ciudad granadina que le pilla a un paso de casa y podrá inculcar su forma de entender el fútbol a unos futbolistas que van a tener en Jorge Molina un gran maestro, y el mejor de los espejos para mirarse. El Arenas de Armilla se lo pidió como futbolista y no se dieron las circunstancias para que marcara goles y ahora toca sentarse en el banquillo con toda una vida dentro del campo marcando goles. Sabe bien donde se mete porque lo ha vivido, y la soledad del banquillo ‘mata’. El futbolista acabado el partido se libera y el entrenador no tiene un respiro y lo es las 24 horas.