Ni de Dénia, ni de Almería: cuál es (de verdad) la mejor gamba roja
La alimentación, el hábitat o el periodo en el que son capturadas son algunos de los aspectos clave para el sabor de la gamba roja

La gamba roja, protagonista del programa Andalucía come Cultura en el Restaurante La Lonja.
Se trata de un fenómeno gastronómico moderno y, en cuestión de unas pocas décadas, ha ascendido al Olimpo gourmet. Si bien se pescó por primera vez en Cataluña en 1930, la gamba roja se ha convertido en menos de un siglo en una de las estrellas del mar.
"Hace 15 años, en Andalucía no se conocía ni se consumía la gamba roja", explica Fernando Huidobro Rein, coordinador del Programa Andaluz de Cultura Gastronómica ‘Andalucía come Cultura’, que hacía parada en Almería para hablar sobre todo lo que rodea a esta joya del Mar de Alborán.
Tal y como detalla el periodista gastronómico Curro Lucas, "la gamba roja en gastronomía es un fenómeno reciente. Se cataloga a principios del siglo XX, pero no se consumía, algo que no sucedió hasta que la tecnología no permitió ir a esas profundidades".
Con el desarrollismo de los años 60, la gamba roja desembarca en las lonjas de Almería: hay inversión para que los pesqueros tengan maquinaria con la que pescar lejos y en profundidad y, además, el turismo permite el desarrollo de la hostelería alrededor de los puertos. Y ahí, la gamba roja empieza un ascenso imparable que se convierte en 'boom' entre los 80 y los 90, hasta el día de hoy.
Repasada la trayectoria histórica de la gamba roja, solo queda hacerse una pregunta. ¿Cuál es mejor? ¿La famosa gamba roja de Dénia o la catalana de Palamós? ¿Qué hay de la gamba roja de Almería?
La mejor gamba roja
"¿Qué pasa con las gambas rojas? Que son la misma especie", explicaba tajante Curro Lucas durante el acto, que tuvo lugar en el Restaurante La Lonja del Puerto de Almería. "Algunos han estado muchos años haciendo marca y genial por ellos. Pero hay muchísimos factores que influyen en la calidad final de un producto pesquero: la temperatura del agua, el periodo en el que se captura, las corrientes, el hábitat y la alimentación ... Muchísimas cosas", detalla Curro Lucas, que también recuerda que la gamba roja "se mueve, por lo que hoy está aquí y en unos meses está en otros sitios".
En definitiva, la respuesta es que no hay una gamba roja mejor que otra, porque es, esencialmente, la misma. Lo que cambia es todo lo que sucede alrededor de su pesca, su manipulación y su cocinado. La fecha del año es más relevante que el caladero; el tiempo que pase hasta que se sirva en un plato es más importante que saber si es de Dénia o de Almería. Por ejemplo, Lucas destaca que "es muy importante el tratamiento térmico y la manipulación en cocina".
En definitiva, "todas son exquisitas. La clave es la cercanía y lo que se tarda", desmenuza el periodista.
A partir de ahí, siempre influirán los gustos: quienes la prefieren grande o de un calibre medio de entre 10-14 cm, si se sirve a la brasa, a la plancha o cocida, con qué se maride, qué ingredientes acompañen a la gamba roja...
Pero, en conclusión, la mejor gamba roja no es de Dénia ni de Almería. Porque es, esencialmente, la misma.