No fue la vuelta a Zaragoza más dulce para Soriano. El míster explicó que la derrota escuece por la forma en la que llegaron los goles del cuadro local, y que la reacción en busca del empate llegó demasiado tarde. Puntuar en La Romareda nunca es fácil, independientemente de la situación del conjunto maño, pero los almerienses pudieron jugar con la ansiedad del adversario de no haber encajado el gol tan temprano. A los 13 minutos Javi Ros adelantaba al Zaragoza y cambiaba la decoración del encuentro. Soriano entiende que el 1-0 les hizo mucho daño, porque “no fuimos capaces de dar un paso adelante hasta después del descanso. El balón parado decidió el duelo”.
Sería de locos que Soriano hubiera dado el aprobado a su equipo con una primera mitad tan floja, sin disparos a la meta de Ratón. Por la mente de los aficionados y de los jugadores no pasó la opción de la igualada: “La tónica del primer tiempo fue clara: no dimos la sensación de poder empatar en el primer tiempo,pero en la segunda mitad sí vi una reacción”.

Sin mordiente
Como el “hubiera” no existe en el fútbol, y el resultado no se puede cambiar, el Almería dejó escapar la oportunidad de ganar de nuevo lejos del Mediterráneo. Al menos, puntuar. Quique metió emoción a la tarde con su gol desde el punto de penalti, que Juanjo y Chuli pudieron rubricar marcando el empate. Se palpaba en el ambiente de La Romareda que había miedo a perder lo que tanto costó conseguir: “Me quedo con la pena de que hasta el minuto 60 ó 65 no hemos tirado a la portería contraria. Ellos no nos han generado tantas ocasiones. Hubo un momento clave, porque Lanzarote debió ser expulsado, pero el árbitro no lo consideró así. Hicimos méritos para haber conseguido algo en La Romareda”, dijo Soriano.

Errores
Si el Almería no está más arriba en la clasificación es por la falta de regularidad. Hacía mucho tiempo que no se sufría tanto con el balón parado en contra hasta que tocó visitar al Zaragoza. Dos despistes muy evitables y 2-0 en contra. La reacción llegó demasiado tarde y Fernando Soriano reconoció que esos fallos te condenan: “El primer gol del Zaragoza llega de una mala salida nuestra. No estuvo bien defendida la jugada por nuestra parte. En la segunda mitad sí se vio a un Almería más valiente, a por el gol. Juanjo y Chuli tuvieron sus ocasiones para empatar en la recta final del partido en La Romareda”, afirma.

Lanzarote
Llevaba razón Soriano en las protestas al colegiado cuando no sacó la segunda amarilla a Manu Lanzarote. El extremo local cortó una salida a la contra de Jorge Morcillo de forma clara y no fue amonestado. La situación encendió a los rojiblancos y también a la grada, que animó más y presionó a los colegiados: “El árbitro sabía que la jugada de Lanzarote era clave y a partir parece que el partido se calentó un poco. Hay que remarcar la jugada de Lanzarote, porque el penalti sobre Quique no lo vi desde mi posición. Puede pitarlo, o no, yo solo le vi caer”.
Soriano no echó balones fuera y señaló que su equipo entró demasiado tarde en el encuentro. Sin gol no hay paraíso en el fútbol.