La Voz de Almeria

UD Almería

Cruz en el mejor partido de la temporada

El encuentro frente al Villarreal da pie para el optimismo ante la visita del Valencia

Akieme celebra su gol al Villarreal.

Akieme celebra su gol al Villarreal.LaLiga

Miguel del Pino
Publicado por

Creado:

Actualizado:

Decepción, rabia y desconsuelo . Es lo que sentí nada más terminar el partido del Almería en el Estadio de la Cerámica. Pero que se me entienda bien. En esta oportunidad la decepción no es por la imagen ofrecida por el equipo en Villarreal. Sino por el resultado final. Porque poco más se le puede pedir a los nuestros en un escenario de esas dimensiones.

Con las lógicas mejoras y aspectos que debe corregir, porque de otra manera estaríamos hablando de otro marcador, creo que la puesta en escena del Almería en el feudo castellonense es para tener muy en cuenta. Hasta el punto que estimo que ha sido el encuentro en el que mejor se ha competido. Y a pesar de todo eso, fue insuficiente.

Balance


Como es norma en el mundo del fútbol los análisis de los encuentros suelen venir condicionados por los resultados. Si el Almería hubiera vencido en El Madrigal hoy estaríamos eufóricos no sólo por la conquista de los tres puntos sino por la buena imagen ofrecida por el equipo que fue en todo, menos en la efectividad en el área rival, muy superior al submarino. Pero seguimos con un solo punto en el casillero y ahora últimos en la clasificación.

Pero esta preocupante situación en la tabla no es sino el resultado de los errores anteriores en los que ha venido incurriendo Vicente Moreno. Desde esta atalaya venimos denunciando que el arcaico, ineficaz y desequilibrado dibujo del 4-2-3-1 con el que el técnico rojiblanco había afrontado sus cuatro primeros compromisos era sinónimo de ruina. Ha sido este sistema el que nos ha llevado a estar donde estamos y no el partido, brillante diría yo, jugado en casa de un rival de mayor nivel que fue inferior en todo menos en la eficacia ante Maximiano.

El entrenador


Moreno rectificó para bien. Se dejó el dibujo precedente en el baúl de los recuerdos, de donde nunca debió salir, y se presentó con 4-4-1-1 muchísimo más positivo en todos los órdenes al dotar de más efectivos la sala de máquinas y situar a Melero, su jugador mejor dotado, muy cerca de Suárez. Si a todo ello le añadimos la guinda de dos medios centros, Lopy y Robertone, que se comieron a sus rivales en todos los duelos y que sacaron el balón con criterio, tendremos las razones de la casi insuperable imagen que el Almería ofreció en su último duelo.

El titular de un diario nacional testifica la gran actuación de los nuestros: ‘El duende de Pacheta convierte una posible goleada en contra en tres puntos milagrosos’. 

A Moreno hay que ‘agradecerle’ que rectificara a la hora de afrontar su quinto toro de los 38 que tiene que lidiar hasta mayo, aunque este fuera tan bravo como el Villarreal, porque hay que recordar que Rubi no se quiso bajar del burro y estuvo muy cerca de llevarnos a Segunda con el incompetente 4-3-3, una variante del que utilizó el Almería en sus cuatro primeros duelos.

Los dos goles recibidos fueron sendos regalos de la zaga que acusó la ausencia de dos de sus laterales derechos, una debilidad que Pacheta supo aprovechar y nuestro técnico no supo aliviar ya que Chumi no encontró las ayudas que necesitaba en todo el partido. El empate no era malo y Moreno debió colocar a Mendes por delante de Chumi para dar consistencia a este costado. Este fue su gran pecado en su mejor partido.

El encuentro ante el Villarreal me da pie para ser optimista. Manteniendo esa linea de juego y mejorando la eficacia en las áreas el ascenso en la clasificación estaría servido. Ahora más que nunca hay que ver la botella medio llena para afrontar con optimismo el duelo ante el Valencia.

tracking