La de ayer no fue una inauguración más para el pueblo de Albox. Con la puesta en marcha de la potabilizadora que este viernes se estrenaba y que precede a la inminente llegada a los hogares del agua apta para su consumo se da respuesta a una reivindicación que ha marcado la historia del municipio en las últimas décadas.

A falta de comprobar los resultados y de que el líquido comience a fluir por los grifos  llegando desde la Estación de Tratamiento de Agua Potable en un plazo aproximado de dos semanas, el acto que ayer contó con la presencia de la presidenta de la Junta de Andalucía supone la materialización de una promesa que ahora zanja las protestas y reivindicaciones que se remontan incluso a mediados del siglo pasado.

Atrás quedan concentraciones ciudadanas pidiendo agua de calidad, enfrentamientos en sesiones plenarias y añejos actos de corporaciones anteriores anunciando que se había puesto fin a este problema que, sin embargo, volvía a reproducirse al poco tiempo dando al traste con las esperanzas de los albojenses.

Día histórico
“Habéis pasado muchos años abriendo el grifo sin encontrar el agua con la calidad que esperabais”, lamentó la presidenta del Gobierno andaluz ante los vecinos asistentes, a quienes reconoció su “paciencia” durante tantos años. Díaz agradeció al alcalde la posibilidad de “compartir este día muy importante” con el municipio y recordó el papel de la Administración que preside a la hora de facilitar los permisos y trámites necesarios para acceder al agua del Negratín.

Además, subrayó que las instalaciones que albergan la potabilizadora se han levantado gracias a un “esfuerzo importante” del Ayuntamiento “en el que ha invertido en torno a 1,5 millones de euros”, concluyendo con lo que consideraba el hecho “más importante” del acto de ayer. “Que cuando abráis los grifos salga agua de calidad”.

Un bien esencial 
Tras la intervención de Díaz fue el turno de Gonzalo Murillo, responsable de Gestagua, la empresa gestora del bien en el municipio, quien ofreció a los presentes los detalles de la estación de tratamiento de agua y de la calidad de la misma.

Para finalizar, el alcalde de Albox, Rogelio Mena (PSOE), se dirigió al auditorio para confesar que alcanzar este logro “no ha sido fácil” y que la llegada del agua en calidad y en cantidad fue un “compromiso del  actual equipo de Gobierno” tras su llegada a la Alcaldía. “Y el agua ya está aquí”, celebró Mena añadiendo que esta “no es una conquista” del Partido Socialista sino “de los ciudadanos de Albox” que finalmente tendrán los mismos derechos” que el resto para “acceder a un bien esencial como es el agua”.