La ruta que une los municipios de Los Gallardos y Mojácar tiene, desde hace apenas unos días, una parada que es imposible de ignorar. Y el motivo no es otro que el mural gigantesco que ahora decora la tienda de mascotas Pets Paradise, una obra de arte que, según su propio autor, es la más grande que ha pintado hasta la fecha en un espacio público.

El artífice de esta impresionante pintura ha sido Francisco Fajardo. Tal y como él mismo ha explicado en una entrevista en la Cadena SER Levante, el proyecto nació del deseo de Andrea, propietaria de Pets Paradise, de transformar la parte trasera de su nave.

Ocho días ininterrumpidos de trabajo

Andrea contactó con Fajardo tras conocer su trabajo a través de Facebook, buscando darle un cambio completo a su fachada que, hasta entonces, lucía blanca y algo desgastada. “Quería mantener la imagen corporativa que tiene ellos, pero a la vez hacerles un buen reclamo porque por esa zona pasan muchos coches y consideramos que era un buen punto tanto como para hacer algo atractivo como para su negocio” comenta el artista.

El reto implicó transformar una simple fachada blanca en una superficie llamativa. Para ello, el mural que Marín realizó principalmente con pincel, brocha y algo de rodillo, requirió de ocho intensos días de trabajo ininterrumpido. “Empiezo a las 9:00h y hasta las 21:00h estoy trabajando. Cuando termino me gusta decir “he trabajado”, no me gusta irme a mi casa descansado” añade Francisco.

Eso sí, las dimensiones del mural no permitieron el trabajo a pie de suelo. El pintor tuvo que recurrir a una grúa de 10 metros para alcanzar al totalidad de la pared, “pero yo la verdad es que a las medidas no le hago mucho hincapié, yo cojo un pincel más grande o un pincel más pequeños y para mí es el mismo número de pinceladas”. Aún así, lo que sí ha reconocido es que “hasta ahora es el más grande que he hecho en dimensiones”.

A falta de confirmación oficial, Francisco Fajardo especula con la posibilidad de que, por su extensión y la técnica empleada – pintado a pincel y brocha – este, sea el mural más grande de la zona. Bien es cierto que, existen otros, aunque realizados con otras técnicas como el spray.

Además, la relación con Andrea fue clave para el resultado final: “Confió mucho en mí a la hora del diseño y me dio total libertad. Yo quería que su marca estuviera presente pero también quería que mi estilo, mi pincelada y mi forma de componer imágenes también estuvieran” señala.

Su historia con el arte

Asimismo, Francisco Fajardo también relató cómo su pasión por la pintura ha guiado su trayectoria. “Nunca tuve planeado hacer de mi pasión un trabajo. De hecho, lo evité lo más que pude, pero actualmente sí me dedico 100% al tema de murales sobre todo en casas” detalla.

La decisión de dedicarse por completo al arte mural llegó tras “varios desengaños laborales” y animado por su esposa que le impulsó a pintar un mural en su propia vivienda. Antes de este giro, Fajardo había ejercido como diseñador publicitario durante años, una experiencia que ahora se ha convertido en un complemento para sus creaciones.

Para él, “la pintura siempre ha sido un desahogo”. Por ello, distingue rigurosamente entre lo que son las “obras de pintura” – los encargos comerciales – y sus “obras artísticas” – las creaciones más personales y libres –.