Cómo transformar un coco en una garrapiñada. Este es sólo un ejemplo de lo que visitantes y vecinos pueden conocer o aprender, si deciden pasar por algunos de los puestos en forma de caseta que la Feria de Artes y Curiosidades del Mundo (Arcumun) ha instalado en una de las plazas más emblemáticas de la localidad de Berja, la Plaza Porticada. Y es que desde el pasado fin de semana y hasta el próximo domingo, quienes se sientan atraídos por la riqueza y mezcla de culturas tienen cabida en este espacio en el que en apenas unos metros pueden adentrarse en la tradición y artesanía de países como Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador, Perú, Honduras, Colombia o Paraguay, y así hasta llegar a 25.

En este sentido, el concejal de Fiestas y Tradiciones y portavoz del equipo de Gobierno, José Carlos Lupión, se mostraba satisfecho con la realización de este tipo de mercadillo artesano en el municipio virgitano, más aún, cuando esta iniciativa “es una de las primeras que se lleva a cabo desde la remodelación de la plaza”. En suma, Lupión señala que “han sido muchos los vecinos que han ido pasando por la feria desde este fin de semana”, por lo que el ambiente que se respira durante estos días en las calles de Berja, está sirviendo de antesala además para la inminente llegada de las fechas navideñas.

Un hecho que no es de extrañar cuando el objetivo que se persigue desde Arcumun no es otro que el de acercar a los ciudadanos una muestra de la gran diversidad de costumbres y tradiciones que existen en el mundo. Y todo ello a través de la ropa, el calzado, la gastronomía, la perfumería, bisutería, y todos aquellos productos típicos y autóctonos de todos aquellos países que se concentran en esta feria del mundo.

Una muestra que abrió sus puertas el pasado viernes y que se puede visitar en horario de mañana y tarde en la conocida plaza virgitana. Aroma a cuero, telas y alimentos típicos de todos y cada uno de estos lugares hacen saborear a virgitanos y visitantes estos días, al menos un pequeño trocito de esos pueblos. Además, lo mejor, todo sin salir de la localidad virgitana.