'La Villa': el nuevo restaurante que reanima un rincón emblemático de Almerimar
El local de la Plaza Batel ofrece desayunos, brunchs, meriendas, una carta variada de pinchos, raciones, tapas y copas

"La Villa" con su nueva decoración en la Plaza Batel
El emblemático local de la esquina, ha vuelto a abrir sus puertas con nueva imagen, nueva carta y un nuevo nombre: "La Villa Almerimar". Detrás del proyecto está Manuel Benavides, vecino de la zona y emprendedor con ganas de devolverle vida al local. Hablamos con él para conocer más sobre este nuevo espacio gastronómico en la Plaza Batel.
"Siempre me dio pena ver este local cerrado. De pequeño recuerdo que funcionaba muy bien cuando era el Millenium, pero nadie había conseguido hacerlo despegar de nuevo", cuenta el dueño para LA VOZ. Fue esa mezcla de nostalgia y visión lo que lo motivó a lanzarse a transformar el espacio.
La elección del nombre no es casual: “Le dimos un cambio radical. Quité el mármol amarillento y lo pinté de blanco. Se quedó como si fuese una villa, y desde ahí empecé a decorarlo en ese estilo mediterráneo, un poco Mykonos”, explica. Así nació la Villa.

Decoración interior del bar
Ese aire relajado y cuidado no solo se queda en la estética. Esta nueva propuesta abarca todo el día, desde desayunos fit y completos hasta copas al atardecer. "Abrimos desde las 7 de la mañana. Puedes tomarte un desayuno con huevo poché y base de aguacate, o simplemente unos buenos churros", explica. Estos últimos, además, llegan con una historia entrañable: "Son los churros del abuelito, en honor a mi padre, que es un crack. Mis hijos le llaman así y me pareció bonito ponerle su nombre a algo del negocio".
La Foodineta
Dónde comer y brindar en Almería y provincia según esta famosa pareja de hosteleros
Karolina Lewandowska
Durante el día, el local ofrece brunchs, tapas y una carta variada de pinchos y raciones. Por la tarde, meriendas con tartas y postres, y por la noche, cenas y un ambiente perfecto para el tardeo. Todo ello con un equipo humano que el dueño valora especialmente: "Hoy en día lo más difícil es encontrar personal cualificado, y tengo la suerte de contar con un gran equipo tanto en cocina como en sala".

Uno de los platos que ofrece el restaurante
Desde su apertura, "la gente nos ha arropado mucho. Este local tiene una historia, y creo que hemos conseguido devolverle esa estima que siempre tuvo", afirma orgulloso.
En cuanto al futuro, su dueño no descarta nuevas ideas o ampliaciones: "Siempre hay cosas en mente, tanto a corto como a largo plazo. Pero de momento, seguimos centrados en ofrecer una experiencia completa en este espacio tan especial".