Marcus, oro en K-1
Batió al checo Dostal y al ruso Anoshkin en una gran actuación

Un campeón.
Marcus Cooper Walz consiguió el oro en K1 1.000 con una remontada prodigiosa en los últimos 250 metros, en los que pasó de quinto a primero. Es la cuarta medalla de oro del deporte español en estos Juegos. El mallorquín nacido en Oxford, de 21 años, de padre inglés y madre alemana, entró en los Juegos tras una reasignación de plazas continentales en el Preolímpico. Marcó 3:31.447. Plata fue el checo Josef Dostal (3:32.145) y bronce el ruso Roman Anoshkin (3:33.363).
Walz ya había sido subcampeón mundial en 2015 y bronce en 2014. Después de la semifinal aseguró: “Voy a hacer el 1.000 de mi vida”. En la víspera no se consideraba favorito, pero siempre dejó caer la posibilidad de conquistar una medalla.
Walz tuvo una salida fulgurante y se situó segundo, tras el portugués Pimenta en los primeros 250 metros, pero cayó al quinto puesto al paso por el medio kilómetro. Ahí se mantuvo hasta el cuarto final de la prueba en el que, igual que hizo en la semifinal,firmó una remontada épica y fue superando rivales hasta cruzar primero la meta, en una increíble exhibición de poderío.
El australiano Stewart, al que Walz tomó siempre como referencia, entró cuarto y quinto fue Pimenta. Los dos grandes favoritos, el danés René Holten, campeón mundial el año pasado, subcampeón europeo en 2014 y actual líder de la Copa del Mundo, y el alemán Max Hoff, que fue plata en Londres 2012 y campeón mundial en 2013 y 2014, acabaron sexto y séptimo respectivamente.