“Puede ser un jaque, pero no un jaque mate"
Ziganda, sobre el Almería

Ziganda.
“El reto es Almería, soltar piernas allí (sesión vespertina este sábado) y preparar el partido, que es un rival muy exigente que nos va a apretar, con jugadores de nivel alto en Segunda". En este sentido insiste en que la escuadra de Gorosito supone "una prueba muy exigente y debemos agarrarnos a las opciones que nos quedan”.
“Los que mejor estén saldrán”, afina Ziganda, sin Villalibre en liza por una rotura muscular, más la espalda, y con el “resgustillo” del empate ante el Mirandés, que se echaron en falta en entregas anteriores ante rivales de postín como “Elches o Albacetes”, lanza Ziganda. Almería puede suponer "un jaque, pero no un jaque mate", ya que en caso de perder se agotaría un alto porcentaje de posibilidades.
La plantilla sigue concienciada ante un rival que no ha dado la talla pese a ser un reciés despeñado de la elite: “Están mejor, todo el mundo apostaba en que el Almería iba a salir de los de abajo, como Mallorca o Valladolid, pero le está costando un poco más de la cuenta. Tiene plantilla para estar más arriba”. Considera que su equipo baja a Andalucía con el objetivo claro de “a ver si les podemos poner en aprietos y por supuesto ganar”.
Un Bilbao Athletic en una dinámica calcada todo el curso: “Damos buena imagen y los contrarios sufren bastante, pero nos cuesta sacar resultados. Somos últimos, jóvenes, cometemos errores de principiantes, pero antes les hacemos sufrir”, desliza el técnico navarro, que confía en un incremento de fiabilidad: “Ahora concedemos menos y llevamos más control del partido que en otros momentos de la temporada y nos hacemos respetar”.
Ziganda considera que la temporada no se le está haciendo larga pese a la angustia de los resultados que les ancha al pozo de la Liga Adelante: “Esto va a toda pastilla. El día a día es corto, tenemos muchos jugadores sobre los que incidir, aunque en el estado anímico tenemos que seguir incidiendo”. Insiste en que varios de los cahorros "darán el relevo a los que están ahora en el primer equipo”, aunque antes pagan un duro arancel, fruto evidente de la extrema bisoñez de la plantilla que maneja: "Tenemos 14 jugadores potenciales de tener un día de perros", ejemplificando por un que tuvo Lekue recientemente en el once de Valverde en el contexto de su sobresaliente temporada.