La maldición del madrileño blanco Velasco Carballo reapareció ayer en el Mediterráneo para hacer posible que el Almería no se apuntara su primer triunfo cuando ganaba por 2-0 en el comienzo del segundo periodo.

El Almería dio la cara El Almería jugó un partido muy serio mostrándose bastante más equilibrado que en anteriores actuaciones. La trama montada por Caparrós para tratar de sorprender a la defensa almeriense con llegadas desde la segunda línea con la incorporación de los centrocampistas Sergio e Ivanschitz fue perfectamente neutralizada por Francisco haciendo que sus dos pivotes no perdieran la posición para impedir las penetraciones de ambos. La defensa mantuvo muy bien el tipo y sólo se vio sorprendida por algún disparo desde fuera del área y el encuentro transcurría por cauces de igualdad y equilibrio en el juego.
Por su parte el Levante mostró su firmeza defensiva habitual, pero se vio superado con relativa facilidad por las bandas, donde Aleix y Suso volvieron a superar a sus marcadores. Sin embargo o bien por falta de precisión en el último pase o por la acumulación de efectivos de los valencianos en torno a su meta Navas, las ocasiones claras de gol también escasearon para los locales. Suso, Aleix y Verza por los locales y Pedro Ríos e Ivanschitz por los visitantes dispusieron de las ocasiones más claras que neutralizaron los respectivos metas.

Ventaja Cuando el primer tiempo estaba a punto de morir, puesto que ya se había rebasado el tiempo, Juanfran corta en falta una internada de Suso cerca de la línea de fondo. Penalti que  Verza transforma con su maestría habitual y el cuadro almeriense que se vuelve a meter en el vestuario con ventaja en el marcador.
Para tratar de enmendar la plana mueve ficha Caparrós dando entrada a El Zhar por una desaparecido Pedro Ríos, basculando a Ivanschitz a la banda. El invento no le funcionó porque apareció Suso que de un estratosférico disparo desde fuera del área bate a Navas. Una vez más el Almería parecía tener encarrilado el partido ante un rival nada espabilado en ataque.

Velasco Casi sin tiempo para que la grada del Mediterráneo disfrutara de la victoria momentánea de su equipo apareció protegida por un guate negro la mano de Velasco Carballo para asestar un golpe bajo y directo a los locales que les dejó ‘grogi’ el tiempo suficiente como para que el Levante pusiera las tablas en el electrónico.
Se cumplía el minuto 53 cuando el Levante se dispone a lanza su segundo saque de esquina. El árbitro, antes del lanzamiento, castiga con amarilla al defensa local y forcejeo de Christian con un delantero rival. Velasco le toma la matrícula y cuando se produce el lanzamiento aprovecha otra caída de espabilado delantero azulgrana para sacarle la segunda amarilla y señalar el correspondiente penalti que transforma El Zhar. En un minuto dos amarillas a Christian y el partido que se pone 2-1.
En pleno desconcierto local llega el tercer córner, cuatro minutos después del tanto visitante. Balón a la frontal del área que Diop, libre de marca, golpea sin parar. Le sale un disparo flojo que entre una nube de jugadores de uno y otro equipo se abre camino hasta el fondo de la red.
A la hinchada se le hiela la sangre en las venas y ven con impotencia y rabia lo que está pasando sobre el terreno de juego, pero los jugadores no se amilanan y, apoyados en el acierto de Francisco a la hora de mover el banquillo, dan una lección de bravura y amor propio, superando a un Levante temeroso a pesar de su superioridad y buscando un triunfo que no llegó porque apareció ‘San Navas’ para rechazar un mano a mano con Rodri y en el último segundo hacer una parada increíble para salvar un gran lanzamiento de falta de Verza.