Hace justamente una semana agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil detenían a cinco personas y practicaban una decena de registros en la Diputación Provincial de Almería, en viviendas particulares y empresas en lo que ya es la segunda fase del ‘caso mascarillas’.

Hasta este verano se investigaban posibles irregularidades en la compra de material sanitario en la pandemia del Covid en 2020 y ahora se extienden a contratos menores de obras públicas de esa institución.

La UCO situó a Almería, con esas detenciones, en el foco informativo nacional. Los informativos de televisión y radio fijaron su mirada – hasta que se conoció el fallo contra el Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz – en la tierra de la legaña (Juan y Medio dixit), de los tomates y del mármol. Las conexiones en directo permitieron a los españoles conocer cómo es la entrada al garaje oficial de la calle Navarro Rodrigo, por donde entraron coches con los cristales tintados y donde iban el presidente de Diputación, Javier Aureliano García, y su vicepresidente segundo, Fernando Giménez, ambos del PP.

Una semana más tarde, los cinco detenidos están en libertad provisional con cargos. García y Giménez han renunciado a sus puestos tanto en la institución como en el Partido Popular. El alcalde de Fines, Rodrigo Sánchez, sigue ocupando el sillón de regidor aunque esté suspendido de militancia en el PP y su hijo y un funcionario de alto rango en la Diputación tratan de recuperar la normalidad en sus vidas tras estar más de 50 horas en los calabozos de la Comandancia.

Donde no se recupera la normalidad, ni mucho menos, es en la esfera política del ‘caso mascarillas’. El pasado jueves por la tarde, el número 2 del PP andaluz, Antonio Repullo, se desplazó hasta la capital para poner orden “en lo de Almería” y un día más tarde compareció con el nuevo presidente (antes era Javier A. García) y consejero, Ramón Fernández-Pacheco, para bautizar la nueva etapa del partido que más votos aporta porcentualmente a la dirección autonómica que lidera Juanma Moreno Bonilla.

No hubo manera de que tanto Repullo como Pacheco desvelaran el secreto mejor guardado. “¿Quién va a ser el próximo presidente de la Corporación Provincial?”, se le preguntó. Y la respuesta sonó a manual de político ya bregado en estas lides: “Hoy no toca”.

Pues ya ha “tocado”. Fue este lunes por la tarde, ya casi anocheciendo, cuando Antonio Repullo – esta vez en Roquetas, el pueblo del presidente de honor y alcalde, Gabriel Amat – bendijo la fumata blanca. El nuevo inquilino del Palacio en Navarro Rodrigo será el alcalde del pueblo más lejano de la capital, María, y actualmente diputado de Deportes, Vida Saludable y Juventud, José Antonio García Alcaina.

No fue una bendición cualquiera la del velezano. Los presidentes del PP en las ocho provincias andaluzas asistieron a la Junta Directiva Provincial para ‘rendir honores’ a José Antonio García y al nuevo fichaje en el partido de Almería. Fernández-Pacheco deja vacante de secretario general y el nuevo número 2 será el también delegado territorial de Igualdad de la Junta, Francisco González Bellido, de Olula del Río y conocido como ‘Belli’.

Así las cosas, Almería se convirtió por la tarde en la capital política autonómica de los populares. Lo que quizá tampoco intuían en la jornada anterior los dirigentes del PP-A es que el PSOE andaluz iba a hacer lo mismo que ellos: traerse a la ciudad de los Juegos Mediterráneos de 2005 a su plana mayor.

En efecto, tras el Pleno donde oficialmente se le dijo adiós a Aureliano García y Giménez, se reunió con cargos provinciales una delegación encabezada por la vicesecretaria general del PSOE y portavoz en el Parlamento, María Márquez; el secretario de Organización, Francisco Rodríguez: su adjunto, Alejandro Moyano, y el responsable de Comunicación en la Ejecutiva de María Jesús Montero, Fernando López Gil.

La de ayer fue una jornada de las que marcan huella en la sede socialista de la calle Jesús de Perceval, donde ejercieron de anfitriones el secretario general, José María Martín, su número 2, José Nicolás Ayala, y otros dirigentes como Soledad Martínez Pastor. Y junto a ellos otros nombres propios como los de los diputados Juan Antonio Lorenzo e Inés Plaza, el senador Antonio Martínez y el parlamentario Mateo Hernández.

Y así transcurrió este lunes donde Almería fue capital política andaluza. Se acercan elecciones.