Los hijos almerienses tienen cuatro patas: "No he parido a mi perra, pero sí soy su mamá"
Cada vez son más las parejas jóvenes que optan por adoptar perros en lugar de tener niños
Lucía y su pareja, junto a Zoe.
En Almería crece una tendencia social cada vez más visible entre las parejas jóvenes: tener un perro en lugar de tener un niño. Y no se trata solo de una percepción. Los datos lo respaldan. Según la última Estadística de Animales de Compañía de la Junta de Andalucía, en la provincia hay 156.596 perros identificados, frente a 120.804 niños menores de 15 años, según el INE. Es decir, casi 36.000 perros más que niños.
Cada vez más familias deciden posponer o incluso renunciar a la paternidad biológica y formar núcleos familiares junto a sus mascotas. Desde LA VOZ, hemos hablado con varias de estas parejas, que destacan cómo factores como la precariedad laboral, el encarecimiento de la vivienda y la conciliación diaria impulsan este giro, que redefine qué significa ser padres en el siglo XXI.
Zoe: una responsabilidad con menos complicaciones
Lucía adoptó a Zoe en abril de 2023, soltera, a través de Miau Almería Canina, y ahora forman familia con su pareja. Explica que no se plantean hijos a largo plazo, ya que "los trabajos, tiempo y economía no nos permiten darles todas las atenciones que necesitan". Del mismo modo, para ellos, Zoe implica una responsabilidad parecida a la de un hijo, pero más manejable: "Puedes irte a trabajar sin depender de que alguien los cuide, no tenemos que preocuparnos por guarderías ni colegios, y sé que no pasa nada si se queda sola". "En definitiva, tiene las mismas responsabilidades que un niño, pero sin tantas preocupaciones", añade.
Lucía y Zoe.
El económico, para ellos, también es un factor a tener en cuenta, y, aunque "hay que tener siempre previsiones por cualquier necesidad que pueda tener", ellos "nunca te van a pedir un capricho". Lucía tiene claro que la maternidad puede darse hacia las cuatro patas: "Zoe no es legalmente mi hija porque no la he parido, pero sí soy su mamá: la alimento, la paseo, paso tiempo con ella".
Arya, la tercera en discordia familiar
Raúl y Andrea adoptaron a Arya como cachorra hace un año y medio, al independizarse juntos, y desde entonces la incluyen en todo: "Siempre nos acompaña en rutas de domingo, playas, vacaciones; ella completa nuestra pequeña familia de tres". El regreso a casa es especial, ya que siempre les recibe eufórica al llegar de trabajar. Ese momento, dicen, "no tiene precio".
Raúl y Andrea, con Arya.
Para ambos, la inestabilidad que viven miles de jóvenes marca un claro cambio generacional, comparado con sus padres: "Ellos a los 20 tenían casa propia o más estabilidad laboral y económica; hoy, independizarse antes de los 30 es un privilegio, con lo difícil que es el acceso a la vivienda". No piensan en hijos pronto, pero dejan una puerta abierta: "Si algún día somos padres, en nuestra familia habrá siempre un miembro de cuatro patas".
Mazi une y llena el hogar
María y Emilio, de 29 años y con 11 juntos, se mudaron hace un año y medio de Barcelona a Huércal de Almería, donde compraron casa. Adoptaron a Mazapán (Mazi) en Miau Almería Canina porque Emilio teletrabaja: "Paso muchas horas solo, y ya había tenido perros y gatos en Barcelona". La decisión fue rápida, y es que "la felicidad que te hacen sentir, lo que te llenan emocionalmente, fue clave; se lo comenté a María y no lo dudamos".
Emilio, María y Mazi, el día de su adopción.
Sin embargo, insisten en la responsabilidad: "Tanto un perro como un niño son importantes, hay que saber el momento y si puedes hacerte cargo". Como tantos otros jóvenes, defienden modelos familiares variados y es que consideran que "tan apta es una (familia) con hijos como una con animales". "Ahora mismo no podemos estar más contentos con la decisión, Mazi nos ha unido más como pareja y nos aporta felicidad. De momento somos tres, pero esperamos que la familia crezca con los hijos que puedan llegar", concluyen.
Las mascotas, en auge en Almería
No solo los perros, que han aumentado un 4% en un año, ganan terreno en la provincia: en total, las mascotas suman 184.601, frente a 174.503 el ejercicio previo, con 26.964 gatos (22.984 antes), 756 hurones (719) y 285 de otras especies (265).
En Almería, perros como Zoe, Arya y Mazi no solo llenan casas, sino que moldean un nuevo paradigma familiar donde la compañía incondicional, la responsabilidad y la inestabilidad socioeconómica priman sobre las cargas tradicionales de la crianza humana. Todas estas parejas elogian y defienden la labor de las protectoras, que facilitan este tránsito hacia hogares más flexibles y afectivos.