El encantador pueblo de Almería que combina mar y sierra ideal para vivir un verano de los de antes
El municipio fue incluido en 2024 en la exclusiva selección de los 'Pueblos Mágicos de España'

Una calle del pequeño pueblo de Enix.
A orillas del mar Mediterráneo, pero también sobre la sierra que lleva su nombre. Este municipio almeriense lo tiene todo; o casi todo. Tradición, gastronomía y fortuna natural. Una combinación que le hizo en 2024 recibir el título de ser uno de los 'Pueblos Mágicos de España', una de las exclusivas listas que recogen los pueblos más especiales del país.
Playas de Almería
La cala de Cabo de Gata protegida del viento de Levante: una joya entre dunas fósiles y aguas cristalinas
Trinidad Rodríguez
Se trata de Enix, una pequeña localidad integrada en el Poniente que brilla por su forma de vida. Sus calles, su gente y su comida son algunos de los componente que han hecho de este pueblo uno de los imprescindibles de la provincia de Almería.
Playa y montaña en uno
La gastronomía es uno de los factores que hacen grande a este pueblo. Tanto es así que Enix se ha consolidado como el epicentro de una tradición muy almeriense: las migas. Cada año organizan un día grande en el que cientos de vecinos y curiosos preparan una enorme paila de migas que disfrutan en compañía. Una costumbre muy almeriense que aúna tradición y gastronomía y que, de paso, atrae turistas cada año.

La Playa de El Palmer, perteneciente al término municipal de Enix.
Su orografía y disposición geográfica es también uno de los aspectos más llamativos del pueblo. Enix tiene tanto playa como montaña. Se integra en la Sierra de Gádor, pero su término municipal se extiende hasta la playa del Palmer, bañada por el mar Mediterráneo. Una pequeña franja litoral que representa la única salida al mar del municipio, entre Almería capital y Aguadulce.
Enix se encuentra, por tanto, a una altitud de 711 metros sobre el nivel del mar en su núcleo urbano, pero también bañado por el mar con una playa de piedras a la que se puede llegar a través de la famosa carretera del Cañarete. Un original rincón costero que ofrece a los visitantes un entorno tranquilo para disfrutar de una playa menos conocida.
Una pausa en el tiempo
En los últimos años, el pueblo también ha optado por una llamativa estrategia en redes para mostrar algunas de sus grandes virtudes. Por un lado, su gente. Y es que su Ayuntamiento lleva meses subiendo vídeos a sus redes en los que dan a conocer a los vecinos que hace grande a este rincón de la provincia.
También ilustran cómo es la vida en el pueblo. Una de esas vidas de pueblo de los de antes que parecen que paran el tiempo. "Los veranos en el pueblo no son solo una estación del año, son una vuelta al origen, una pausa en el tiempo", detallan en una publicación reciente.