Pasaba por Almería para poner el punto y final a su etapa en el Real Zaragoza y se llevaba por delante al que lo fichó: Juan Carlos Cordero. Miguel Ángel Ramírez, el entrenador canario que firmó por uno de los grandes de España como recambio de Víctor Fernández, era pasado por esa trituradora de entrenadores que es la Segunda División. No se acabó el mundo para el entrenador con una dilatada experiencia internacional y le ha contratado uno de los clásicos de la vieja Copa de Europa, que ha ganado títulos en Suecia y goza de un enorme prestigio internacional. La salida de Ramírez del Real Zaragoza tuvo réplicas en los despachos, acabando con uno de los mejores directores deportivos de España.

Pasaba por LaLiga dirigiendo a dos colosos de la categoría de plata. Sporting de Gijón y Real Zaragoza, con hambre de Primera, fueron dirigidos por Ramírez como antes lo hizo en el mercado internacional dado que su primera aventura en los banquillos era en Ecuador, donde llegó a ganar la Copa Sudamericana con el Independiente del Valle. Su brillante etapa le llevaba al Internacional de Brasil y probó fortuna en los Estados Unidos, dirigiendo al Charlotte del estado de Carolina del Norte. También tuvo un corto periodo de tiempo en el fútbol catarí dirigiendo a Al-Wakrah. Ahora sale de nuevo fuera de España para afrontar el gran reto de su carrera.

Del paro a dirigir en la Europa League

El salto de calidad que ha dado en su carrera profesional es destacado, porque se pone al frente de un equipo acostumbrado a ganar la Liga de Suecia que compite a escala internacional. Es el Malmö un equipo ganador que ha ganado cuatro de los últimos seis títulos en su país. Un club con un enorme palmarés y conocido por el fútbol español ya que siempre ha costado ganarle en Suecia. El reto es diferente a los vividos hasta la fecha en España en dos grandes equipos con la mirada puesta en el ascenso. Hacer campeón al Malmö implantando su forma de entender el fútbol, ya es su nuevo reto con la misma valentía que viene desarrollando su labor de entrenador dando la vuelta al mundo. La derrota en Almería le costaba el puesto, porque la trituradora de entrenadores no sabe de trabajo ni de palmarés.

Una etapa en Segunda con dos caras

Miguel Ángel Ramírez Medina nacía en Las Palmas de Gran Canaria hace 41 años y empezaba a trabajar en las bases de la Unión Deportiva, luego a la canrtera del Alavés y saltaba a Ecuador para lanzar su carrera que contempla la dirección de dos grandes de España con un objetivo común: ascenderlos a Primera. En El Molinón dejaba huella metiendo al equipo en la lucha por el ascenso y acabada su etapa salía dejando huella. Con el Zaragoza buscaba lo mismo, pero le dieron una plantilla hecha y un equipo en caída libre. Ser el recambio de Víctor Fernández no era tarea fácil y su etapa que comenzaba en diciembre terminaba en marzo sin poder alcanzar sus objetivos. El fútbol, que te da y te quita, le ha regalado un gran reto internacional.