Faltaba una hora para que Gonzalo Melero llegase a la tienda y ya había gente esperando. Algo está cambiando en la ciudad porque los más pequeños tiran de los padres y los abuelos en eventos como este. Base Deportes Blanes y Russell Athletic se dieron la mano para que el centrocampista de la UD Almería viviese una jornada especial y emotiva, porque pudo comprobar en primera persona cómo siente a su equipo la gente de la capital y la provincia.

A las seis y media de la tarde comenzó el acto y los empleados del establecimiento se quedaron maravillados y asombrados por la respuesta de los seguidores rojiblancos. Los primeros de la cola tuvieron suerte y se llevaron una gorra de regalo, así como la foto firmada por el jugador. Los más pequeños entregaron de todo para la firma. Desde una funda del móvil a una bota. Banderas, bufandas, camisetas y fotos para el recuerdo en Base Deportes Blanes.

Alucinados

La marca de ropa que viste a Melero, Russell Athletic, se mostró ilusionada por la respuesta de la gente porque había pasado más de media hora desde que se abrieron las puertas y la cola llegaba hasta la entrada del Mercado Central. Este tipo de iniciativas gustan mucho entre la afición. Con entrenamientos a puerta cerrada y la distancia con la grada del Mediterráneo, que el futbolista madrileño pueda estar cara a cara con pequeños y mayores solo puede traer cosas positivas.

Cercano

Un detalle de capitán en momentos delicados a nivel deportivo. Le desearon suerte para San Mamés y el resto de la temporada, porque lo que más preocupa ahora mismo es que el proyecto deportivo no consiga asentarse en Primera División. Pese a la mala clasificación y no haber logrado victorias en ocho jornadas, el ambiente que se vivió en Obispo Orberá es una clara muestra que Almería tiene ganas y arropa a sus jugadores.

Durante hora y media latieron los corazones rojiblancos en Base Deportes Blanes con Russell Athletic y Gonzalo Melero. Sobresaliente para los que apostaron por el evento, para el deportista por su cercanía, y a los aficionados que disfrutaron como nunca. Revolución total en Obispo Orberá.