Fran Fernández no era el primero de la lista y hubo momentos donde estuvo más fuera que dentro dela entidad. Alfonso García ha girado sobre su propio eje o le hicieron girar para decidirse por Fran.

Como hizo en su día con Francisco cuando le dio un banquillo de Primera División, ahora lo que tiene que hacer el presidente es dotarlo de buen material para que el Almería de Fran sea duradero.

Sabe Alfonso García que muchos entrenadores de los consultados no han querido venir tras las temporadas anteriores y el carrusel de destituciones. Culpa todo el presidente.

Si Fran es el elegido da igual que llegue por exceso o por defecto. Lo importante es dejarlo trabajar y que cuente con el apoyo del club y de su presidente. Todo lo demás corre de su parte.

Con todas las consecuencias a trabajar y a ganar dinero que es de lo que se trata cuando dos o tres niños del filial debuten el Segunda este año y al próximo a hacer caja: club vendedor.

Los aficionados del Almería seguro que prefieren sufrir con Fran y sus niños a hacerlo con un entrenador de caché y una plantilla lesionada.

Se acabó el debate del banquillo.

El vestuario del Almería no debe de ser como la Pasarela Cibeles.

Que Alfonso y los marcadores no lo vuelva a abrir.