Cajamar y Ruralcaja se fusionan y crean el gigante de las rurales españolas
Cajamar y Ruralcaja se fusionan y crean el gigante de las rurales españolas
La almeriense Cajamar y la valenciana Ruralcaja, las dos primeras rurales españolas, sellan hoy su alianza para dar lugar a una sociedad resultante que se codeará con los bancos medianos españoles por volumen de negocio. Nace el coloso español del sector y tendrá sus pies y su cerebro en Almería, con unos activos agregados de 40.000 millones de euros. Hoy se reúnen los consejos rectores de sendas entidades en Almería y Valencia, que, previsiblemente aprobarán la operación de fusión no por absorción sino con la creación de una sociedad nueva que empezará a operar a finales de abril, una vez obtenga el visto bueno del organismo supervisor. El próximo enero está previsto que las asambleas respectivas refrenden la resolución de los consejos rectores. Tras la fusión de las dos entidades cabeceras, el grupo de Cajas Rurales del Mediterráneo (CRM) se integrará a su vez en el Grupo Cooperativo Cajamar bajo el abrigo de la solvencia común y cuya sede estará en Almería. En el Consejo Rector resultante de la nueva sociedad, de la que aún no ha transcendido el nombre, se sentarán 20 miembros: 14 representantes de Cajamar y seis de Ruralcaja. Los alfiles de Cajamar en el tablero serán siempre mayoría, aunque haya representantes de Málaga, Valladolid y la propia Valencia como resultado de anteriores fusiones. Los activos de la caja almeriense que preside Antonio Pérez Lao suponen tres veces más que los de la valenciana. La suma de empleados de ambas compañías se acercará a los 7.200, de los cuales 5.262 los aporta Cajamar; la suma de sucursales llegará 1.536, de las cuales 1.027 están bajo la batuta almeriense. Los resultados de Cajamar después de impuestos suman 38 millones, de ellos 33 aportados por la caja almeriense, y por volumen agregado de negocio, la entidad fusionada alcanzará los 70.645 millones de euros con datos del último Balance, de ellos 52.000 son los aportados por la antigua caja rural almeriense. Puesto número 15 del ránking Cajamar protagoniza así la mayor operación de concentración de cajas rurales en España y quedaría como en el puesto número quince por volumen de negocio , tras Bankinter, en el ránking de entidades en el sistema financiero español. Esta operación de concentración, como todas las que están desarrollándose en el sistema financiero, es una consecuencia del proceso de restructuración en el que está inmerso el sector y que afecta tanto a bancos, cajas de ahorros y rurales que buscan ganar fortaleza financiera y seguir, así las recomendaciones del Banco de España. El organismo supervisor ha recomendado en repetidas ocasiones que España debe quedar con unos operadores financieros que acumulen al menos 150.000 euros en activos, una pretensión que aún se antoja lejana, teniendo en cuenta que la suma de todas las rurales daría lugar a un grupo que no alcanzaría los 100.000 millones de euros. Suma de activos Cajamar y Ruralcaja más sus respectivos Sistemas de Protección Institucional (SIP) sumarán una vez concluida la integrarán más del 50% del negocio del sector de las rurales en España. Cajamar ha ído incorporando entidades a su grupo desde su fusión con Málaga y después con la Rural de Castilla y León, Baleares y las valencianas Caja Campo, Casinos, Petrer, Castellón, Albalat y Turis y está a punto de cerrarse también la incorporación de Canarias. De hecho, durante los últimos meses, la lucha en el mercado valenciano entre la almeriense y Ruralcaja se había hecho más enconada a consecuencia de la alianza de la almeriense con alguna de sus competidoras. Ruralcaja con una morosidad próxima al 13% verá mejorar con su integración en Cajamar sus principales ratios, al igual que la propia caja almeriense.