Les ha costado dios y ayuda la decisión, pero al final ya tienen su candidato. Desde que Javier Arenas ganó las pasadas elecciones autonómicas pero no consiguió gobernar en Andalucía, el Pp ha venido deshojando la margarita del candidato. No ha sido buena la espera, se han perdido muchas fuerzas en ellas, y por si fuera poco se han dejado algunos cadáveres en las aceras peperas. No conozco personalmente a Juan Manuel Moreno, los dirigentes del Pp de Almería dicen que es un hombre preparado para ganar y hacer la política que necesita Andalucía. Estoy convencido de que los Luises, los Eugenios y a todos los que he leído y escuchado habrían dicho lo mismo de ser otro el candidato. Por lo que muy poco valen sus argumentos sobre el nuevo hombre del Pp andaluz. Juan Manuel tendrá que ir demostrando en el tiempo si es la persona que necesitan los populares para ganarle al Psoe en su gran feudo del sur.

Lo cierto es que el señor Moreno Bonilla dijo hace un tiempo que él no sería el candidato y grabada quedó su voz y su imagen para la pequeña historia de la militancia. Es de desear que algún día no se lo tengan que recordar. Acude el hombre a la llamada del deber con ánimo de consenso y agradeciendo a Mariano Rajoy la oportunidad ofrecida, que no es otra que la de hacer ahora lo que no quería hace unos meses: Ser la imagen del Pp en la comunidad más importante (por votos y militancia) de España. Si como aseguran los que lo conocen es un político bragao, sabrá que no lo tiene fácil por estas tierras, que la corrida va a ser de las duras y que los morlacos van a tener todas las divisas, incluso la suya propia. Si la cara fuera el espejo del alma, yo diría que estamos ante una persona de aspecto noble, algo blandito, que no ha podido decirle que no a Rajoy en su petición de lanzarle al temido ruedo andaluz, y creo que el hombre es consciente de que se puede llevar todas las cornás del mundo. Parece como si a alguien en el Pp le hubiera interesado dejar que pasaran las hojas del almanaque y sacar al futuro candidato en el último momento, con poca o nula capacidad para preparar una campaña en la que darse a conocer en toda Andalucía. El torero Moreno Bonilla ya está en la plaza saludando al personal, vayan apareciendo los morlacos.