La oferta gastronómica de Almería no puede ser más variada. Bebe de sus tradiciones y costumbres e implementa la rica materia prima a la que tiene acceso; desde el mar hasta la agricultura. Buen pescado, frescas hortalizas o ricas carnes. Casi de todo se puede encontrar en la región. Tan variada es la gastronomía almeriense que hay incluso algunos platos típicos que aún buena parte de España desconoce.

Recetas tradicionales que, dependiendo del lugar en el que se elaboren y la tradición de cada hogar, varían en su forma de servirse y de tomarse. En este caso, se trata del ajo colorao, un receta emblemática de varios lugares del levante almeriense.

Se elabora con patata, tomate, cebolla, pimientos y, por supuesto, varios dientes de ajo. Se le añaden condimentos como sal, pimentón, perejil, azafrán o comino molido y también algún tipo de pescado, como el bacalao. En otros lugares de Almería, en lugar de bacalao, emplean raya.

Preparación

La elaboración es sencilla y bebe de las técnicas más  tradicionales. En una cazuela se pone a cocer las patatas con los pimientos secos y los tomates. Cuando estén a media cocción las patatas, se añaden los trozos de raya (o bacalao) y se deja que hierva todo unos 15 minutos más.

En un mortero, al antigua usanza, se majan los cominos con el azafrán, los ajos, los pimientos rojos cocidos y los tomates. En otro recipiente se machacan las patatas y se incorpora el preparado anterior. Se rectifica de sal y se agrega el aceite, el pimentón, un poco de su caldo, si lo precisa, y la carne del pescado desmenuzada. Se mezcla todo con una cuchara de madera y se sirve.

Una de las recetas más auténticas de Almería que, pese a que cada vez se ve menos en las cocinas, forma parte de la cultura y la tradición de a provincia.