Aún siguen presentes en Huércal-Overa los nombres de los históricos dirigentes locales como Pepe López, Diego Ortega o Luis García Collado. Pero lo que en el recuerdo colectivo es anecdótico, en el seno del Partido Popular se convierte en un espaldarazo mayor aún para trabajar por la mayoría absoluta, ante el temor de que cualquier resultado que no sea un gobierno en solitario posibilite pactos entre Ciudadanos y PSOE. Ello, en palabras del alcalde y candidato popular es más que nada una “preocupación por el pueblo. Somos el único partido en que hay reflejada una tranquilidad, un equilibrio, un proyecto consolidado”. La mayoría le permitiría concluir el Plan Estratégico iniciado hace cuatro años y del que aún quedan proyectos como el acceso norte desde la Autovía al Hospital La Inmaculada, finalizar los cuatro kilómetros que faltan de la vía verde, la Escuela Municipal de Música o el puente de San Isidro. Además, una nueva legislatura garantizará la mejora del alcantarillado obsoleto en muchos barrios que tienen aún carencias en este ámbito.

El objetivo final es que Huércal-Overa sea “un entorno donde invertir y emprender. Hemos hecho políticas innovadoras con la bonificación de las licencias de aperturas de las empresas, hemos puesto a disposición de los jóvenes bajos comerciales en el polígono industrial para empresas, en la plaza de abastos disponen de un local por 75 euros al mes para montar un negocio”.

El barrio de La Era fue el escenario elegido para dar el pistoletazo de salida a la campaña electoral en el que se resaltan tanto los proyectos de futuro como el gran trabajo de gestión realizada. Los vecinos resaltan que se trata de un barrio en el que tradicionalmente las urnas no se han decantado claramente por ninguna de las formaciones mayoritarias. Por ello, entre los asistentes se espera que la llegada a las listas del candidato del barrio Andrés Sánchez y la renovación de Jennifer Espín en la candidatura, dé un vuelco hacia el PP.