En 2009 el Ayuntamiento de Almería decidió realizar obras de peatonalización de varias vías del centro de la capital como son Reyes Católicos, Zaragoza, García Alix o Padre Santaella entre otras.  Hoy, casi cuatro años después, los comerciantes de la zona admiten y reconocen que dichas obras han servido para dar un poco más de vida al centro comercial de la capital.

Al margen de esta valoración positiva de las obras, los diferentes comercios reconocen que a pesar de esta peatonalización de varias calles, el repunte en sus ventas no se ha visto mermado. Si bien todos coinciden en que esta situación se ha visto influenciada por la coincidencia de las obras con el comienzo de la crisis.

Reyes Católicos Una de las calles más concurridas del centro de Almería es la calle Reyes Católicos cuyo calzada fue peatonalizada en dos tramos desde la Concejalía de Obras Públicas y Servicios Urbanos de 2009.
La librería Picasso lleva bastantes años instalada en la céntrica calle y según Ana Amezcua, trabajadora del negocio, “de momento nuestras ventas no se han visto aumentadas por el hecho de peatonalizar la calle, si es verdad que esta obra dinamita a nivel cultural el centro comercial y de ocio de la ciudad”, a lo que añadió que “a medio y largo plazo es muy posible que si veamos un repunte en las ventas puesto que las obras han facilitado el tránsito de gente por el centro”.

Otro de los comercios longevos y conocidos de la zona es la tienda Tararí Ke te Ví de la calle Méndez Núñez del centro de la ciudad. La tienda es regentada por un matrimonio, Juan José Molina es uno de los propietarios de la misma y en declaraciones a LA VOZ explicó la coincidencia de las obras con los años de crisis. “Nosotros no podemos decir que nuestras ventas hayan sido mejores con respecto a otros años aunque se peatonalizara la calle, el hecho de coincidieran las obras con estos años bastante malos de crisis, nos ha hecho ir cada año a peor”. Molina también añadió que “aún así consideramos que las obras de peatonalización en estas calles ha sido y será buena para el tránsito de gente”.

Triángulo de oro Lo cierto es los comercios de la zona en general están contentos por haber ganado espacio para el peatón en el conocido triángulo de oro (las calles comprendidas entre la Rambla, Obispo Orberá y el Paseo de Almería), ya que como asegura el dueño del negocio 400 Gallinas, “antes veíamos coches aparcados en la puerta de los negocios que dificultaban mucho el tránsito de viandantes, ahora es mucho más cómodo para la sociedad caminar por estas calles y, con ello, poder disfrutar de los establecimientos que nos encontramos aquí”. “Considero que el comercio, al menos de esta calle (Reyes Católicos), se ha visto favorecido con las obras”, añadió.

Otra de las comerciantes de la zona, propietaria de la tienda De Grana y Oro, también señaló que “la peatonalización de estas calles, a parte de dotar a la ciudad de cierta modernidad también hace a las madres estar más tranquilas ya que si algún niño se te sale de la tienda no tienes que estar tan preocupada como antes porque ahora no pasan coches.”

También la hostelería No solo los comercios dedicados a la venta de ropa, objetos o libros se han visto beneficiados de las obras que llevó a cabo el Ayuntamiento de Almería, a los hosteleros de la zona también les está repercutiendo de manera positiva, aunque también alegan