La cuenta atrás ha terminado. Este jueves, 7 de agosto, empieza una nueva edición del Dreambeach, la segunda que se celebra en El Toyo, perteneciente al término municipal de Almería capital. Con Villaricos aún en el recuerdo, y si bien ya habrá tiempo de hacer balance, esta zona de la ciudad se prepara para lo bueno y lo malo de un festival de música electrónica.

Porque, obviamente, junto a los ruidos y las molestias que tendrán que soportar los vecinos durante cuatro intensas madrugadas, la otra cara de la moneda es económica. Más allá de las previsibles ventas que puedan hacer supermercados y bares de la zona debido al indiscutible incremento de afluencia, el gran 'agosto' que trae el Dreambeach debajo del brazo se traduce en incrementos de precio en los alquileres de apartamentos para los días del festival.

Así las cosas, en el momento de escribir estas líneas aún quedan apartamentos que buscan inquilinos en El Toyo para los días del Dreambeach. Pero no son baratos, precisamente: en las zonas más cercanas al recinto de conciertos, un apartamento con dos dormitorios y tres camas para cuatro inquilinos alcanza el precio de 422 euros por noche durante los días del festival en el famoso portal Airbnb. 

De esta forma, dormir las noches del Dreambeach costaría más de 1.500 euros. Este precio se traduce en cerca de 130 euros por persona y noche.

Y alejándose del epicentro festivalero, la situación no mejora mucho: el precio de apartamentos en la zona de Retamar se sitúa entre los 1.100 y los 1.300 euros para las tres noches que serían necesarias para disfrutar del Dreambeach y dormir relativamente cerca.

Estos precios se sitúa bastante lejos de los que hay disponibles en la misma plataforma para la siguiente semana. En pleno puente de agosto, con el día 15 festivo en toda España, el precio de cada noche en los apartamentos disponibles en El Toyo apenas supera los 100 euros.

Los elevados precios tienen, a su vez, dos razones: la positiva, que pasa por hacer negocio de un evento único y de fama internacional que se celebra en una zona en plena ebullición inmobiliaria y, por otro lado, la negativa. Esta última pasa por 'asegurar' en cierto sentido lo alquilado. No en vano, en la primera edición de El Toyo, la del pasado verano, se dieron casos de alquileres bastante más asequibles (de unos 800 euros) que fueron aprovechados por los inquilinos más pillos para alojar a más personas de las previstas inicialmente. Así, una subida de precios puede cubrir no ya desperfectos, sino la posibilidad de que duerman realmente más personas de las que contratan el alquiler.

¿Licencia para alquilar o denuncias?

Y precisamente el capítulo de la pillería es el que da pie a la otra cara de la moneda del festival y el negocio inmobiliario que supone el Dreambeach para algunos propietarios de inmuebles en El Toyo.

Las comunidades de vecinos de distintos residenciales de la zona más próxima a la celebración del festival han compartido un mensaje explicando cómo actuar ante una situación que, muy probablemente, se dará en sus edificios durante estos días: la del alquiler esporádico sin licencia de Apartamento Turístico.

En el caso de "pisos o viviendas turísticas ilegales (...) lo mejor es denunciarlo", expone el mensaje al que ha tenido acceso este periódico. "Vivienda que veáis de alquiler y que no tenga en la puerta las siglas AT: se denuncia, porque además deben tener un número de registro", plantean los propios vecinos.

En el caso de que no exista ese cartel con las siglas AT y el número de registro correspondiente, los propios vecinos recomiendan como medida lo siguiente: "Tomas nota de la dirección exacta y te vas al área de urbanismo del Ayuntamiento de Almería o lo denuncias on line. Presentas escrito de que existe un alquiler turístico y vacacional en esa dirección y que te consta que no está dado de alta en el registro y, si fuera el caso, tampoco aprobado en acta en el residencial", explican. Para terminar el proceso, los vecinos recomiendan acudir a la Policía Local con ese documento registrado en el Ayuntamiento. "La vivienda que sea, que haga bien las cosas", sentencia el mensaje compartido en varios residenciales.

¿Y los hoteles?

Cabe pensar que, para el sector hotelero, la llegada de la segunda edición del Dreambeach en El Toyo también es un particular 'agosto'. Sin embargo, lo cierto es que la ocupación de los numerosos hoteles de la zona no ha llegado al 100%. 

Volviendo a comparar precios, los de las habitaciones disponibles son idénticos a los que hay disponibles para la semana siguiente, la del multitudinario puente de agosto. De esta forma, se podría decir que el Dreambeach trae debajo del brazo un 15 de agosto particular. Ni más, ni menos.

Lo que sí resulta curioso de analizar es la amplia oferta de apartamentos turísticos en zonas no tan cercanas al festival. Así, en otros portales se anuncian alquileres bastante más económicos (100 euros la noche para hasta 6 personas) en lugares tan poco turísticos como Loma Cabrera, con el reclamo de estar a solo 5 kilómetros del festival.

De esta forma, el sector inmobiliario vive un particular 'boom' de la mano del festival. Un verano dentro del verano. Música electrónica con subida de demanda, incremento de precios y, por qué no, algo de tensión urbanística en la zona más turística del término municipal de Almería capital.