De épocas tan remotas como el Paleolítico se hallan restos de Turre, un municipio situado en el Levante Almeriense de unos más de 4.000 habitantes, camino de Mojácar o de Garrucha. Su parada es obligatoria, ya sea para contemplar la belleza de Sierra Cabrera o para degustar su original gastronomía en cualquiera de sus numerosos restaurantes. 

Tampoco hay que olvidar uno de los descubrimientos más importantes fue el agárico de Gatas, un asentamiento que se descubrió tras una publicación de 1887 y que sirvió para proporcionar numerosas claves del paso de la edad del cobre a la edad del bronce. 

Existe además un cuaderno monográfico donde se recogen todos los hallazgos funerarios, la situación aproximada de las sepulturas y la fecha de su descubrimiento. Se destaca también la presencia de casas de piedra, barro y tierra roja, con sepulturas de tinajas y losas, herramientas de cobre y alhajas de plata.

Tumbas de la edad del cobre en Turre

En los alrededores de Turre, el excavador de yacimientos prehistóricos de Almería, Pedro Flores, conocido por su labor en los yacimientos tan importantes de El Argar y Los Millares, encontró tumbas de la edad del cobre en la Casa Alta, la cañada del Palmar y Albolunca. 

Sin embargo, el descubrimiento más importante que hizo en Turre fue el del poblado argárico de Gatas. De hecho, el equipo dirigido por Vicente Lull, de la Universidad de Barcelona, y por Robert Chapman, de la Universidad de Reading (Inglaterra), ha proseguido en los últimos años las excavaciones de Gatas, con un trabajo modélico, ofreciendo nuevas aportaciones de sumo interés para el conocimiento de la cultura del Argar. 

La Edad Media: Mozárabes y Musulmanes

Otras culturas posteriores también dejaron sus huellas junto a los límites de Sierra Cabrera: los celtas de la edad del hierro en Las Alparatas; los íberos y los romanos en Cádima. Sin embargo, el punto de inflexión lo marcó la conquista musulmana de la Península Ibérica, cuando en el espacio geográfico de Turre se produjeron importantes cambios. 

Por ejemplo, en torno a Sierra Cabrera van a aparecer varias mozarabías, esto es, pequeños pueblos elevados en las cumbres de las montañas y totalmente inaccesibles, que estarán enfrentados directamente al emirato de Córdoba y, luego, frente al califato, particularmente en las fechas próximas a la fundación por Jairán del reino de Almería, ya que asimismo se han encontrado monedas fatimitas.  

A fines de la Alta Edad Media (siglos X-XII), con la expulsión de los mozárabes, desaparece la actividad humana en los poblados antes mencionados. Fue entonces, a partir de la fundación del reino nazarita de Granada (siglo XIII), cuando el espacio geográfico de nuevo se remodela. 

Turre en época morisca

La conquista del reino de Granada por los Reyes Católicos es fundamental para posibilitar la creación del municipio de Turre. Pocos conocen que en 1488, los musulmanes que vivían en Mojácar y que no quisieron marchar a África, fueron obligados a salir del pueblo y a asentarse en el interior del territorio a más de una legua de la costa. 

Fue entonces cuando se formó una aljama mudéjar en Turre, pues entonces las partes llanas junto al río de Aguas pertenecían al término de Mojácar. Fue en el año 1501 cuando se produjo la conversión de los mudéjares de Turre en cristianos nuevos, e inmediatamente hubo un intento generalizado de huida a África que fue abortado por las guarniciones cristianas de Mojácar y Vera. 

Si bien la convivencia entre unos y otros fue positiva hasta el año 1570, fue entonces cuando se produjo la expulsión de todos los moriscos de las tres poblaciones que existían en el término municipal de Turre.