Escondidas entre las paredes rocosas de Berja y Fondón o en los montes entre la Mojonera y Vícar se encuentran algunas de las rutas más emocionantes y originales de la provincia almeriense. Y es que Almería no es solo sol y playa, sino que en los últimos años, la región se ha convertido en un destino emergente para los amantes de la escalada y de la adrenalina. Uno de los síntomas de esta transformación es la proliferación de vías ferratas en sus montañas, que ofrecen una alternativa tanto a la población local como a los aventureros que vienen de fuera.

Desde los desafiantes pasos en el corazón de la Alpujarra hasta los espectaculares recorridos entre barrancos y empinadas laderas, estas rutas equipadas con escalones, puentes colgantes y cables de acero han conquistado a principiantes y expertos por igual. Varias localidades almerienses han apostado por este turismo activo al adaptar sus parajes naturales para que valientes de todas las edades puedan ascender riscos imposibles sin necesidad de experiencia previa en escalada. El auge de estas instalaciones no solo impulsa la economía local, sino que también refuerza la conexión de los almerienses con un paisaje tan abrupto como fascinante.

¿Qué es una vía ferrata?

Este tipo de ruta es un recorrido cuyo itinerario avanza tanto vertical como horizontalmente a través de clavos, grapas, presas, pasamanos, cadenas, puentes colgantes y tirolinas, de manera que se pueda avanzar por la ladera de la montaña de manera segura. Los senderistas acceden así a lugares a los que no se podría llegar de otra forma que no fuese la escalada.

La seguridad del recorrido se basa en un cable de acero que va acompañando a los participantes durante toda la ruta, de manera que estos puedan ir enganchando según avancen un par de mosquetones que, gracias a un arnés y a un disipador de energía, evitan catástrofes en caso de caída. Se trata de una moda importada desde los Dolomitas, en los Alpes Italianos, que poco a poco se ha ido implantando en Francia, Suiza, Alemania y, últimamente, también en España.

"Es para todas las edades, aunque se recomienda no hacer una via ferrata con menos de 8 o 9 años ni con más de 60 años, si bien la edad es algo orientativo. Si pesas 40 kilos o más mejor, lo ideal es estar entre los 40 y los 100 para mayor seguridad", explican desde Xplora Almería, una empresa de cuatro amigos que organizan actividades de multiaventura (entre las que se encuentran este tipo de rutas).

"En ningún momento van a estar solos, siempre irán con monitores que actuarán en caso de dudas o necesidad, por lo que pueden realizar la actividad aunque no tengan experiencia previa", tranquilizan desde el equipo, que añade que para realizar una ruta con ellos basta con llamar a la compañía para concretar un día. "Si llama solo una persona o una pareja, intentamos juntarla con otro grupo para sacar adelante la actividad. Suele hacerse los fines de semana, que es cuando la gente tiene más tiempo", explican.

Vías ferratas en Almería

Desde la compañía de turismo de naturaleza Xplora Almería señalan tres vías ferrata en nuestra provincia. La primera es la Vía Ferrata Castala; una opción perfecta para aventureros de diferentes niveles, ya que ofrecen tres recorridos distintos adaptados al nivel del grupo. Situada en el Parque Periurbano de Castala, en Berja, ofrece un recorrido -para principiantes y familias- de dos horas, otro intermedio por tres y uno último -nivel experto- con una duración de cuatro horas y con técnicas como el rapel, tirolinas, bisagras o puentes colgantes. Se trata de una vía de nueva construcción y consta de una de las instalaciones más completas de toda Andalucía. Para llegar, Xplora Almería recomienda "ir dirección Berja. Una vez en el pueblo, hay que tomar el desvío dirección Castala, donde se tomará la salida dirección Parque Periurbano de Castala. Allí, en su parte alta, están las instalaciones".

Otra de las vías más famosas en la Vía Ferrata Barranco de Carcauz, de dificultad media, con tramos de ascensión vertical, horizontal, puente tibetano y descenso mediante rappel. Para llegar, Xplora Almería recuerda que en la autovía A-7 dirección el Ejido hay que tomar la salida de La Mojonera. Una vez allí, hay que salirse por La Mojonera.

Si el visitante busca un recorrido con tramos verticales que ponen los pelos de punta y vistas inolvidables del barranco de Carcauz, de sus acequias y de sus acueductos, esta es la opción perfecta. El final de la ruta es un descenso en rappel desde una altura aproximada de 75 metros. 

Finalmente, la Vía Ferrata Fondón, indicada para aquellos que busquen iniciarse en este tipo de deporte de la naturaleza, se encuentra en pleno corazón de la alpujarra almeriense, en una zona que, al igual que la anterior, ofrece unas vistas espectaculares. Para llegar, uno ha de dirigirse al pueblo de Fondón, desde el que se tomará el desvío hacia el merendero. Desde este, se iniciará el recorrido a pie hasta alcanzar la vía ferrata, que ofrece desde tirolinas y puentes tibetanos hasta una espectacular subida de 70 metros de altura.