“Es inusual”: Fernando y las rarezas del fútbol
Afronta su novena temporada en el Almería: “Cuando eres feliz en un sitio todo es mucho más fácil”

Fernando Martínez tiene nueva competencia en portería con la llegada de su paisano Andrés Fernández.
Almería es su casa, su hogar. Nació en Murcia hace 35 años y cuando en 2027 llegaba al Mediterráneo ni se imaginaba estar nueve años defendiendo la misma camiseta. Fernando Martínez Rubio ha roto el guion del fútbol moderno donde los jugadores van y vienen por el mundo y es mucho más que un simple portero, ya que es el nexo de unión perfecto con la grada y la labor de capitán necesaria sobre todo en verano.
El deportista de élite es egoísta porque siempre quiere jugar, pero Fernando mantiene el mismo semblante en el campo o en el banquillo, y es por ello que Rubi y el Almería lo querían pese a la remodelación del proyecto deportivo, donde otros pesos pesados como Maximiano, Édgar, Melero y Robertone ya se han quedado apartados.
Desde la concentración de Marbella habló Fernando para UDA Radio para transmitir sus sensaciones a pocas semanas de iniciar su noveno curso en el club: “Es inusual, raro ver a un jugador tantas temporadas en un club, pero soy feliz en el Almería. Me encanta la ciudad, a mi familia también, así que todas las partes estaban de acuerdo para seguir un año más”.
Estar en casa vale mucho
Asentado en Almería con la familia, Fernando no tenía en mente marcharse y como el club contaba con él, la renovación de contrato no fue nada complicada. Empezó su etapa siendo suplente de René Román y ahora competirá por la titularidad con su paisano Andrés Fernández, “al que no conocía personalmente hasta ahora, pero hace muchos años coincidimos en una escuela de porteros”. Además, entiende que “el sentimiento de pertenencia que se va cogiendo con el tiempo es mayor. Aunque sea de otra ciudad, llevo ocho años aquí y soy un almeriense más”.

El guardameta rojiblanco en la concentración de Marbella.
¿Cuál es su labor fuera del campo?
El stage del Almería sirve para unir al vestuario, estrechar lazos, apoyarse y conocerse. Fernando por experiencia y galones en el equipo toma la iniciativa y trata de hacerle la vida más fácil a los fichajes que han llegado -y llegarán- en este largo mercado: “Es una pretemporada con mucho cambio, con caras nuevas e ilusiones renovadas. Intentamos que la adaptación sea rápida, tratándolos como nuestros hijos, que conozcan el club, la ciudad, y que la estancia sea cómoda”.
Camino de romper nuevos récords
Puede ser en breve el portero con más partidos en la historia del Almería, donde a lo largo de las últimas décadas han estado los Barbero, Diego Alves, Casto Espinosa, René Román, y en especial Esteban Suárez. “No soy de manejar esos datos pero me encantaría entrar en esas páginas del club”, reconoce.
Y para ello la reconstrucción del Almería va a ser clave. Dos años sin lograr los objetivos tiene consecuencias y la operación salida está en marcha. Los que llegan no lo van a tener tan difícil porque “cuando conoces la categoría todo es mucho más fácil y rápido. Queremos que se vea un Almería cerca de sus objetivos”.
El Almería, un club trampolín
Que el Almería haya vendido por 16 millones a Marc Pubill al Atlético de Madrid y Luis Suárez al Sporting de Portugal por 25 entre fijos y variables es la clara muestra de que aquí se puede crecer: “Se ve lo que ha crecido el club desde el cambio de propiedad. Se ven ventas importantes y que haya un traspaso así al Atlético de Madrid habla de la magnitud que está adquiriendo el Almería. Los futbolistas saben que aquí pueden crecer”.