Sergio Ramos, uno de los jugadores más destacados de la historia del fútbol español, es el único futbolista que supera a una leyenda de la UD Almería en una curiosa clasificación compartida por la cuenta de Instagram @postunited.

A lo largo de la historia, el fútbol ha generado múltiples rankings para medir el impacto de los jugadores en el campo. Desde los más conocidos, como los máximos goleadores o los líderes en asistencias, hasta otros más específicos, como los kilómetros recorridos, balones recuperados o duelos ganados.

El exjugador del Real Madrid, campeón del mundo y de Europa con la selección española y ganador de cuatro Champions League, se ha caracterizado por su liderazgo, fortaleza defensiva y capacidad ofensiva, habiendo sido una pieza clave en todos los equipos en los que ha militado a lo largo de su extensa trayectoria. Además, su estilo de juego intenso y su entrega en cada partido lo han llevado a protagonizar numerosas acciones al límite del reglamento.

Según este ranking, Sergio Ramos ha sido expulsado en 30 ocasiones a lo largo de su carrera, la última de ellas este mismo fin de semana con su actual equipo, el Monterrey mexicano, lo que le convierte en el jugador más expulsado de todo el mundo en lo que va de siglo XXI.

Curiosamente, el segundo puesto de esta lista lo ocupa un jugador que dejó huella en la UD Almería. Se trata de Felipe Melo, centrocampista internacional brasileño que llegó al Almería en la temporada 2007/2008 procedente del Racing de Santander. Con anterioridad, había militado en el Flamengo, Cruzeiro y Gremio de Brasil, además de en el Mallorca.

Felipe Melo firmó por cinco temporadas con el equipo rojiblanco, aunque solamente estuvo un año en el Estadio de los Juegos Mediterráneos. Su extraordinario rendimiento, con 34 partidos jugados y 7 goles anotados, hizo que la Fiorentina se lo llevara a Italia. 

De allí, pasó a la Juventus, uno de los grandes de Europa, y posteriormente jugó en el Galatasaray turco, regresando luego a Italia para jugar en el Inter de Milán. El final de su carrera lo pasó de regreso en Brasil, con cinco temporadas en el Palmeiras y tres más en el Fluminense.

El futbolista, ya retirado, fue expulsado en 26 ocasiones durante todas las temporadas que estuvo en activo. Curiosamente, ninguna de ellas fue como jugador de la UD Almería.