La Voz de Almeria

UD Almería

El parte del Almería da pánico

Hasta siete jugadores están en la sala médica

Iván Martos retirándose en camilla de La Romareda.

Iván Martos retirándose en camilla de La Romareda.LaLiga

Publicado por
Carlos Miralles

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Da miedo ver el parte de bajas en la UD Almería. No es una situación novedosa porque todos los equipos sufren contratiempos a lo largo de la temporada, aunque no es tan habitual que esos sustos se centren en la línea defensiva y que además se conviertan en lesiones de larga duración. 

Esto provoca que cualquier plan de Rubi salte por los aires, ya que no paran de lesionarse futbolistas en el eje de la zaga, una posición tan importante o más que la de delantero centro. Las malas noticias llegaron en Málaga con Juanjo Nieto, que se rompió el ligamento cruzado en una disputa de balón. Tiene para 8 meses. Luego le tocó a Chumi en otra acción fortuita al despejar la pelota en el descuento del Almería-Mirandés; se rompió el quinto metatarsiano del pie izquierdo y el plazo de recuperación es para dos meses y medio o tres. Aquí la alerta era amarilla porque quedaban Martos, Babic y Carriço para aguantar.

Increíble

En el Almería-Fuenlabrada solo aguantó media hora Daniel Carriço, que sufre una lesión en el cuádriceps y el club anunció que no podrá competir durante las próximas cuatro semanas. Y en Zaragoza se cerró el círculo, o eso esperan en el vestuario del Almería, con Iván Martos, que puede tener una lesión grave en la rodilla derecha. Los médicos le harán pruebas en los próximos días para determinar el alcance pero las primeras exploraciones en el mismo terreno de juego no tenían buena pinta.

Si a esto se le une que Babic jugó en la segunda mitad con una dolencia en la espalda, el club tiene que moverse urgentemente para firmar uno o dos centrales para afrontar lo que queda de temporada con garantías. Son siete deportistas en la sala médica porque Lucas Robertone tiene para varias semanas y Dyego Sousa pidió el cambio en la segunda mitad en La Romareda. Golpes y más golpes que se iban solapando con victorias, pero en Zaragoza saltó por los aires el plan del míster por las lesiones.

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