¿Cómo reaccionará la UD Almería a la derrota de Ponferrada?; ¿José Gomes dará con la tecla y hará que el equipo vuelva a su mejor versión?; ¿habrá muchos cambios?; ¿ganará por fin ante un rival directo?. Son muchas preguntas que este sábado tendrán su respuesta en el Mediterráneo. El Leganés, que también viene de perder en casa frente al Fuenlabrada, es la piedra de toque perfecta para conocer el momento de forma anímico y futbolístico de la plantilla. Tras perder siempre se genera rabia en un vestuario para dar un giro de tuerca, y más cuando tu objetivo es ascender por la vía directa. Los rojiblancos realizaron el segundo entrenamiento de la semana en el Anexo con todos sus efectivos disponibles, a excepción de Jorge Cuenca, que se marchó con la Selección Española Sub-21 y no estará el sábado ni tampoco el martes en La Rosaleda.

El ambiente de la sesión es diferente, con menos espacio para las bromas y sí para el trabajo, porque el Almería está cometiendo errores muy graves que le cuestan goles y partidos, como en El Toralín. La cita con el Leganés es especialmente clave, primero porque el grupo puede dejar muy descolgado a un rival directo, acabaría con la mala racha frente a los grandes, e incluso hay posibilidades de recuperar la segunda plaza, siempre que el Espanyol pierda este viernes en su visita al Castellón. Solo dos semanas aguantó el equipo en posiciones de Primera, y en caso de no ganar en el Mediterráneo, ese objetivo se puede marchar a dos partidos.

José Gomes trabajará durante dos días más para valorar si hace cambios de piezas y de sistema, o permanece fiel a su estilo, con la alineación habitual retocada con la vuelta de Ivanildo Fernandes y Umar Sadiq en las posiciones de Jorge Cuenca y Juan Villar, respectivamente. Lo que si ha quedado claro es que el Almería encara una semana crucial, en la que debe presentar su candidatura al ascenso directo dejando atrás a Leganés, Málaga y Rayo Vallecano. Aquí todos se la juegan. La novedad en la sesión fue Curro Harillo, guardameta del Almería B, que sustituyó a Lluís Tarrés.