Indalajer ha reunido el pasado fin de semana en Aguadulce a un centenar de socios y personas beneficiadas de su apoyo, de su lucha contra la adicción al juego en sus múltiples variantes y novedades de hoy.

Ayudas. Para Manuel Fernández estas jornadas celebradas en el municipio de Roquetas de Mar “han sido muy provechosas para la gente que empieza en esto y que conozca a otras personas que ya se han recuperado, para que vean que se puede salir de este problema” .  ¿Qué apoyo institucional tienen?

“Solo nos ayuda la Junta, ni ayuntamiento ni Diputación. Hemos pedido ayuda pero ni me han recibido. Tenemos el apoyo de José Galdeano, el que siempre nos apoya desde el año 2000”.

Mujeres. ¿ Cuál es la principal novedad de los últimos tiempos en cuanto a las adicciones por juego?

“Las nuevas tecnologías, las compras compulsivas y la situación de la mujer jugadora, que tiene menos apoyo por parte de la familia. Prácticamente el ochenta por cierto de nuestros asociados son hombres. Las mujeres son las que apoyan al resto de miembros pero si es al contrario, a ellas nadie las apoya”.

Crisis y juego. “Con la crisis  tan grande que hay no me explico de dónde sale tanto dinero”, afirma Manuel Fernández. Sin embargo, la principal novedad no es el repunte del problema clásico sino el de los nuevos ganchos. “Esto todavía no ha explotado fuerte, estamos en los primeros coletazos, con el whatssapp, los smartphones y las tablets. Veo a la gente sentada en una mesa y todos con el móvil sin hablarse. Ahora es mucho peor”, asegura el presidente de Indaljer.

Juegos online. “A nuestra sede vienen las familias a preguntarnos por lo que podemos hacer por sus hijos. Se ponen a jugar en grupo y ni comen ni duermen. Eso es terrible. Estos se vuelven violentos con los padres. Se afronta poco a poco, es un proceso largo”, asegura Fernández, que ha conocido este año cinco jóvenes enganchados a los juegos que ya están recuperándose.