El pequeño altar en una roca junto a uno de los lugares más misteriosos de Cabo de Gata
Todas las personas que han tenido el placer de encontrarse con este pequeño rincón hablan de la magia del lugar

Imagen del altar de la Virgen de Brecha, dentro de una roca.
Almería es una tierra de maravillas a simple vista y secretos que vale la pena descubrir. Un secreto que no tardó en hacerse viral tras sus primeras visitas fue el 'templo hippie' de Miguel Ángel.
Este extraño y mágico lugar se encuentra en Carboneras, en la playa de La Galera. Comenzó como un pasatiempo de Miguel Ángel, un jubilado madrileño de la Policía Local. El antiguo policía empezó a apilar una piedra tras otra y, sin quererlo, creó un templo al aire libre que sirve para reflexionar sobre la naturaleza y su relación con Dios.
Precisamente, esa conexión espiritual con Dios dio lugar a la creación de otro espacio, uno no tan conocido y que despierta fascinación: el altar de la Virgen de la Brecha.
Tan solo unos pasos más allá del conocido Templo Hippie de Miguel Ángel, los visitantes pueden encontrar un pequeño altar, donde varias rocas pintadas adornan una piedra central en la que se ha dibujado a la Virgen.
Todas las personas que han tenido el placer de encontrarse con este pequeño rincón hablan de la magia del lugar y animan a los futuros visitantes a dejar una ofrenda.
Incluso, se sugiere peregrinar a ella en Semana Santa, un momento en el que la fe y el arte se unen en los pasos que inundan las calles de cada pueblo y de la propia capital.
La humildad del altar, las vistas que acompañan a la Virgen, el sonido del mar tan cerca y el paseo previo por el Templo Hippie de Miguel Ángel, conforman la experiencia de recogimiento perfecta para quienes prefieren alejarse de las ostentosas iglesias o de capillas abarrotadas.
Lo mejor es que este fantástico lugar puede visitarse en cualquier momento del día, aunque hay horas más mágicas que otras. La luz dorada del atardecer es perfecta para vivir una experiencia que, aunque ya era única de por sí, se hace aún más especial.
Llegar hasta él, además, es muy sencillo: tan solo se debe ir a la playa de la Galera o hacer una pequeña ruta de senderismo que pasa por la Torre del Rayo y bordea la costa.