En previsión de que el Grupo Municipal socialista en el Ayuntamiento de Carboneras presente un recurso contencioso administrativo con respecto a la última convocatoria de Pleno, celebrada el pasado 31 de marzo y en donde se procedió a la aprobación del Plan de Ajuste local, el alcalde de Carboneras ha decidido ratificar en la sesión prevista para hoy miércoles cada uno de los asuntos abordados en la sesión anterior.

“Ante un nuevo posible recurso de los socialistas, a los que tanto les gusta judicializar la vida política, nuestros asesores jurídicos nos han indicado la conveniencia de ratificar los acuerdos adoptados en el último pleno, incluido el Plan de Ajuste que ya fue aprobado y enviado al Ejecutivo el mismo día en el que finalizaba el plazo para hacerlo”, asegura Salvador Hernández, alcalde de Carboneras.

Esto, a juicio del primer edil “no implica que, tal y como señalan los socialistas, no actuásemos de forma correcta o irregular”. El alcalde explica que los plenos ordinarios del Ayuntamiento de Carboneras se deben celebrar el último viernes de los meses impares “como así ocurrió en el mes de marzo. Después de haber sido convocado por mí, como alcalde de Carboneras y a falta de cerrar los últimos detalles del Plan de Ajuste, el Secretario municipal llevó a cabo un aplazamiento del mismo, por orden expresa mía. Así que no hay ninguna ilegalidad, sólo las verdades a medias que cuenta el grupo de la oposición”.

El alcalde confía en que dicho Plan de Ajuste sea aprobado por el Ministerio de Hacienda “porque sería el único modo de poder seguir pagando la deuda de 5,2 millones de euros que dejaron los socialistas a proveedores”. Añade Salvador Hernández que a esta cantidad “hay que sumar también los 2 millones de euros, que desde que entramos en este consistorio se han ido abonando en el pago de facturas pendientes. Lo que nos lleva a afirmar que la deuda que dejaron los socialistas en Carboneras supera los 7 millones de euros. Y luego tienen la desfachatez de no asistir al pleno donde se aprobó un Plan con el que se pretende ir saldando esa deuda que ellos mismos adquirieron durante anteriores legislaturas”.

Admitir una “ilegalidad”

Por su parte, el Grupo Municipal socialista considera que “la obligación de repetir el pleno del Plan de Ajuste reconoce que el anterior fue ilegal” al tiempo que se pregunta “en qué quedará el Plan de Ajuste teniendo en cuenta que ya se han convocado tres sesiones plenarias diferentes para tratar de aprobarlo y que la última de ellas ya estaba fuera del plazo dado por el Gobierno central”, en palabras de su portavoz, José Luís Amérigo.

Amérigo explica que el Pleno del pasado 31 de marzo “fue convocado con la firma del Secretario Municipal en lugar de la del primer edil, algo que legalmente no está permitido”, a lo que añade que “para dicha sesión no se había facilitado a los Grupos de la oposición la documentación sobre dicho Plan, ni se había informado del mismo en Comisión Informativa previa al Pleno”.