Un colegio con más de cuatro décadas de vida y al que no llegan las reformas
El Solymar sigue con instalaciones muy deterioradas a la espera de un arreglo que se demora

Visita a las instalaciones del colegio Solymar de Matagorda.
El colegio Solymar de Matagorda sigue a la espera de poder iniciar una nueva vida que le ofrezca un cambio radical a unas instalaciones con 46 años de existencia. Un centro que permiten hacer un viaje al pasado nada más cruzar sus puertas.
Y es que solo hay que echarle un vistazo al tremendo desgaste de la pista deportiva o al estado de su fachada, con más persianas fuera de sitio que en el suyo, para darse cuenta de que necesita una actuación urgente.
Llamamiento
Desde el Ayuntamiento de El Ejido se ha vuelto a insistir, una vez más, en la necesidad de acometer una actuación de forma urgente en este centro. Además, el alcalde, Francisco Góngora, ha culpado a la Junta de Andalucía de “su falta de compromiso con un colegio que no admite más reparaciones ni trabajos de mantenimiento porque muchos de sus estructuras, equipamientos o materiales han agotado ya su vida útil por lo que sólo cabe sustitución”.
Y es por todas estas cuestiones por lo que la delegación de Educación de la Junta de Andalucía tiene anunciada una inversión de 600.000 euros para una reforma integral del mismo.
No obstante, Góngora duda que “con 600.000 euros se pueda dotar al centro de gimnnasio, ampliar el comedor, ampliar la cocina, renovar todas las aulas... yo lo veo muy complicado. Con lo cual creo que el presupuesto se quedará corto”
Además, el regidor ejidense también ha recordado que “las cosas se van dilatando en el tiempo y se van retrasando donde tenemos ejemplos como Almerimar, donde el centro se ha quedado pequeño y llevamos siete años esperando una ampliación”.
Mantenimiento
El precario estado en el que se encuentran muchos de los elementos del centro ha obligado al consistorio a duplicar la media de inversión en mantenimiento que se viene realizando en todos los centros. Pero, según Góngora, “cuando un elemento agota su vida útil, pues hay que sustituirlo. Y eso le corresponde a la Junta”.
Por otra lado, desde el consistorio se ha aprovechado para reivindicar otras necesidades educativas en los núcleos del municipio como la ampliación del IES Francisco Montoya o trabajos de reforma y modernización en los centros educativos Jesús de Perceval, CEIP Punta Entinas, CEIP Santa María Águila y CEIP San Agustín, cuyos alumnos no cuentan ni siquiera con un pabellón o pista deportiva en condiciones.
Asimismo, Góngora también ha aprovechado para hacer un llamamiento a la delegación de Educación en aspectos como como reforzar la doble docencia, el incremento de personal de apoyo educativo, el aumento de mediadores interculturales o el incremento en el número de plazas de comedor escolar.
Almerimar
Otro de los asuntos que ha generado bastante malestar en el consistorio ejidense es el hecho de que las aulas prefabricadas vuelvan a ganar protagonismo en un colegio quitando espacio, en este caso, a una pista deportiva. Y es que eso es lo que va a ocurrir de cara al próximo curso en el colegio de Almerimar.
En este sentido, la concejala de Educación ejidense, Julia Ibáñez, ha vuelto a reiterar que “en la reunión con la delegada le dijimos que fue un jarro de agua fría este anuncio porque llevamos siete años pidiendo ese nuevo colegio en Almerimar. Es un núcleo de población que tiene una evolución demográfica imparable y las previsiones de la delegación van muy muy por detrás de las necesidades demográficas de nuestro municipio”.
Y es que el problema de escolarización en Almerimar es un asunto que está sobre la mesa y que cada vez se está convirtiendo en más grande. Y es precisamente esto lo que va a obligar a tomar una decisión que va en una línea opuesta del camino emprendido por parte de la delegación de Educación, la de instalar aulas prefabricadas.
Así, Julia Ibáñez lamenta que se hable “de unas medidas provisionales que son realmente unas aulas prefabricadas, algo que llega ahora que la tendencia y lo que pedimos desde el equipo de gobierno, encabezados por el alcalde, es lo contrario, que se vayan eliminando aulas prefabricadas, no que se vayan incorporando prefabricadas a nuestros centros”.
Por tanto, así pintan las cosas en Almerimar de cara a un próximo curso académico en el que seguirá sin haberse hecho todavía el nuevo centro, una instalación que ha sido anunciada por parte de Educación pero que, de momento, “no tiene fecha de inicio”, lamenta Ibáñez.