Quá pasa con la política en Albox
El pasado día 3 un coche del Ayuntamiento de Albox, conducido por quien hasta unas horas después iba a ser alcalde del municipio, Rogelio Luis Mena, era aparcado ante la puerta de la sede del PSOE local. Un empleado municipal abrió el maletero y procedió a descargar cuarenta cajas archivadoras de documentos. Del hecho ha quedado un testimonio gráfico realizado por algún miembro del PP. Este partido hizo llegar a los medios una nota en la que afirmaba que “podría ser documentación que habría salido del Ayuntamiento”.
Se especulaba sobre la posibilidad de que esos archivadores fueran los que contenían la documentación que el portavoz popular, Juan Pedro Pérez Quiles, ha pedido reiteradas veces y cuya negativa en su entrega ha desembocado en la inhabilitación del alcalde. Ni Rogelio Mena, ni nadie del equipo de Gobierno ni ningún responsable del PSOE local sintieron la necesidad de emitir nota de aclaración alguna.
Es habitual que cuando un alcalde abandona su cargo proceda a la retirada de la documentación no oficial guardada en su despacho. En este caso, sorprendían dos cosas: el abultado volumen de los expedientes y el punto de destino, la sede del PSOE. Recordemos que el equipo de Gobierno local hacia varios meses que había abandonado la disciplina socialista. Pero ni un hecho ni otro son elementos suficientes para concluir que no se trataba de documentación ajena a la institución. Además, el traslado se hizo a plena luz del día y con la colaboración de empleados públicos.
Parecía que estos hechos habían pasado al olvido cuando, unos días después, el 16 de marzo, con Sonia Cerdán de alcaldesa, otra fotografía distribuída por el PP resucitaba la polémica. El jefe de la policía local procedía a cargar las que parecían las mismas cajas en una furgoneta del Ayuntamiento. “Lo que está sucediendo (…) nos tiene muy alarmados por la impunidad y desfachatez con que se mueven cajas de archivos repletas de documentación que son trasladadas desde el Ayuntamiento a la sede de PSOE y viceversa”, afirmaba Pérez Quiles, que ha denunciado los hechos ante la Guardia Civil. “Es la alcaldesa quien debe explicar a los vecinos y a la justicia por qué hay documentos públicos en circulación”, requería.
Y Sonia Cerdán ha dado esas explicaciones. Considera "graves acusaciones" las vertidas, confía en que la documentación en cuestión sea "personal" y asegura que esa documentación “ha regresado al Consistorio”. En la nota distribuida por Europa Press se dice que “la regidora ha asegurado que desconoce qué tipo de documentación fue la que se llevó el exprimer edil, si bien ha mostrado su "confianza" en su excompañero de gobierno, quien le manifestó que entre los documentos transportados figuran "fotos personales, notas de prensa" y otros efectos de pertenencia personal. “¿Hay alguien que pueda sospechar que un policía se preste a participar en algo ilegal?, se ha preguntado.
Albox lleva demasiado tiempo inmerso en la polémica política, que ha derivado frecuentemente ante instancias judiciales. El episodio de las cajas no ayuda a establecer la “paz” entre los grupos municipales. La nueva alcaldesa ha actuado correctamente ordenando el traslado de esas cajas hacia dependencias municipales, sobre todo para disipar cualquier duda sobre su contenido.
En ninguna cabeza humana cabe la posibilidad de que las dichosas cajas sean expedientes municipales oficiales. No pueden ser otra cosa que documentos almacenados por el alcalde, de uso propio y no institucional. ¿Por qué, si es así –que estoy seguro de que así es- no se ha ofrecido de inmediato la respuesta adecuada, bien por el propio Mena, bien por el equipo de Socialistas Albojenses o bien por el PSOE, cuyo protagonismo en esta historia aún nadie ha aclarado?