No puedo estar más de acuerdo con Luis López. Lo que necesita el Psoe son caras nuevas de verdad. Hombres y mujeres que no hayan estado mediatizados por el poder. Hombres y mujeres que se hayan hecho a sí mismos, que hayan llegado a la política a servir y no a servirse.

Uno recuerda a aquellos militantes socialistas de los primeros 80  y qué distintos a los de los 90, inmersos ya en la corrupción de aquellos tiempos de Felipe con poder omnímodo en todo el país, o a los del nuevo siglo de Zapatero, más preocupados por el cargo en el partido, el navajazo del compañero, el puesto de trabajo, la comisión, el enchufe o el Ere de turno.

Todo lo anterior no sirve si no cambiamos muchas de las leyes y normas por las que se gestionan los partidos. Nada va a cambiar el nuevo presidente de la Junta si el partido sigue en manos de unos cuantos, encargados de hacer las listas, nombrar a los candidatos y manipular la gestión.

Juan Manuel Llerena se siente mosqueado con las primarias, y cualquiera que tenga sentido común. Si hablas con los militantes almerienses te cuentan que ellos piensan lo mismo, pero no son capaces de hacer lo que Juan Manuel: Decirlo en voz alta. Libremente. Sin ataduras.

Los militantes de los partidos necesitan libertad y no la tienen dentro de sus organizaciones. Mientras ocurra así, poco se puede hacer por el cambio y la transparencia.

Se les llena la boca de democracia, democracia a los dirigentes políticos, pero no la practican en el interior de sus partidos. ¿Y cómo se puede llamar demócrata a alguien que no la lleva al seno y al día a día de su trabajo político en la secta en la que milita, sea el Psoe o el Pp?

¿Creen que cambiará en algo el Psoe ya sea Susana, Luis o el de Jun el que consiga la victoria en las primarias socialistas? Sí. Cambiarán algunos nombres en la dirección y veríamos los cambios de posturas de los que ahora se han decantado por tal o cual candidato.

Pero la cadena del partido seguiría funcionando en el mismo sentido. Nada habrá cambiado, pero nos contarán y cantarán nuevas milongas y tangos, cuando todo es volver, volver a lo de siempre. Pero no quieren cambiar las leyes y normas que les rigen. No quieren democracia dentro del partido.