Cuando levantaba la voz y decía a algo que “no” iba a ser que “sí”. Antolín era Antolín y punto. Lo conocí cuando todavía pitaba partidos y tenía un físico deportivo. Luego llegaron los achaques de salud que nunca le lograron doblegar. Iba a su tarea, ‘malo’, como decimos en Almería. Nunca fallaba. Siempre cumplidor. Antolín nos ha dejado haciendo lo que más le ha gustado en esta vida: servir a los demás. Ayudar a los que le rodeaban. Con su carácter ‘renegón’ protestaba por todo pero hacía más. Los que le conocíamos sabíamos que detrás de ese tono elevado de voz había una buena persona dispuesta a darlo todo por los demás. Sus días más felices los pasó como federativo. En la calle Reyes Católicos primero y en Javier Sanz después. Antolín fue uno de los hombres fuertes de Nicolás Uclés realizando cargos de responsabilidad. Era muy recto en su proceder y no pasaba ni una. Su despacho se ganó el respeto de nuestro fútbol pero al final siempre salía su vena buena y terminaba ayudando a todos. Era así. Nunca pedía nada para él. Antolín siempre llevaba una carpeta debajo del brazo con temas a resolver en su mayoría de fútbol para solucionar mil y un problemas. Él siempre estaba con sus achaques que trataba de aparcar cuando llegaba la hora de cumplir con la obligación. Si le encargabas algo a Antolín iba al fin del mundo para realizarlo. Leal siempre a sus amigos. Cumplidor con sus jefes. Sensible con los futbolistas. Amigo de los árbitros. Vecino ejemplar. Muchos se darán cuenta (ahora que no está) que Antolín se ha ido al otro barrio sin poderle agradecer esos favores que les realizó. Muchos pensarán que detrás de aquel ¿Dónde te metes Antolín? había una buena persona que solo se apartaba de los demás por su enfermedad llevada con elegancia. Todos le vamos a echar de menos. Antolín no tiene una definición como persona. Hay que inventarla. Era un corazón hecho hombre con una coraza de tipo ‘renegón’ que decía “no” cuando era “sí”. Saben muchos al leer esto que discutir con Antolín era posible. Imprescindible porque si te salías de la norma lo encontrabas. Si a alguien le hizo daño Antolín le deben perdonar porque no tenía maldad. Pido que le perdonen. Él siempre perdonó a todos. Te echamos de menos Antolín. Un beso para Paco Guillén.