21 años después...

En dieciséis meses, Almería podrá lucir con todo su esplendor la que es la Casa de todos

Ana Martínez Labella
08:59 • 19 mar. 2022

Corría el año 2001 cuando Ayuntamiento de Almería y Junta de Andalucía, entonces ambas bajo gobiernos socialistas, firmaban un convenio marco para la rehabilitación de las Casas Consistoriales y la Plaza Vieja. El tiempo fue pasando y la obra se fue eternizando año tras año hasta que más de dos décadas después, y ya con gobiernos populares en ambas administraciones, se iniciaban los trabajos de la última fase de una reforma que va a durar más que las obras del Escorial. Y no es broma.



Pero como agua pasado no mueve molino, aunque conviene no olvidar, tanto el Gobierno del cambio de Juanma Moreno como el de Ramón Fernández-Pacheco prefieren mirar al futuro, ilusionados con el comienzo de una actuación que vendrá a devolver a los almerienses no solo un edificio administrativo, sino una parte muy importante de su historia. Porque terminar esta rehabilitación no sólo aporta valor patrimonial y arquitectónico a nuestra ciudad, sino también el valor inmaterial de la recuperación del uso y la costumbre de la actividad municipal en el lugar en donde siempre ha estado, donde la han conocido nuestros mayores y donde queremos que la conozcan también las próximas generaciones de almerienses. 



La recuperación de la Casa Consistorial es un factor fundamental en el objetivo de la reactivación y dinamización del Casco Histórico a través del eje que forman la Alcazaba, La Hoya, el Cerro de San Cristóbal y la Plaza Vieja. Y en dieciséis meses, Almería podrá lucir con todo su esplendor la que es la Casa de todos los almerienses, pero adaptada a los nuevos tiempos, desde la que poder seguir prestando los mejores y más eficaces servicios a los ciudadanos.



Su puesta en uso ayudará en los nuevos retos y exigencias de futuro que tiene por delante nuestra ciudad, ahora sí acompañada de una Junta de Andalucía y un presidente leales y comprometidos con esta tierra. Como dijo nuestro alcalde, el Ayuntamiento “es el nervio y el pulso de la ciudad de Almería, y dignificar su sede no es sino mostrar a los almerienses el respeto que nos merece la sociedad de la que salimos y a la que servimos”. 







Temas relacionados

para ti

en destaque