El Ayuntamiento quiere quedarse el antiguo edificio de Correos

Inicialmente habla de compra pero no descarta optar por una expropiación

Fachada del antiguo edificio de la sede central de Correos
Fachada del antiguo edificio de la sede central de Correos La Voz
Lola González
15:08 • 02 mar. 2021

El Ayuntamiento de Almería quiere quedarse con el antiguo edificio de Correos. Así lo ha afirmado la portavoz municipal, María del Mar Vázquez, quien asegura que para ello “se barajan todas las opciones” desde la compra a la cesión e incluso la expropiación del inmueble a la Sociedad Estatal de Correos y Telégrafos.



Esta intención municipal de quedarse con el edificio se daba a conocer con la aprobación de una partida genérica en el presupuesto de la Gerencia de Urbanismo en el que se incluye una parte para su posible adquisición. Una compra que asegura Vázquez “está consensuada con los diferentes grupos municipales” con los que ya en una reunión pasada se cerró la opción de buscar una solución para un edificio que lleva cerrado y acumulando problemas desde el año 2011.



Lo cierto es que el Ayuntamiento lleva negociando “una solución desde hace más de un año” y ahora que se conoce el interés por adquirir el inmueble se entiende la sorpresa que le produjo que el Gobierno central lo sacara a subasta en el mes de julio en el seno del equipo de Gobierno. De hecho, era la propia concejal de Urbanismo, Ana Martínez Labella, la que explicaba que se quedaron “estupefactos” al comprobar el anuncio cuando solo quince días antes habían mantenido conversaciones para ver la fórmula en la que resolver la situación en la que se encontraba el convenio urbanístico.



Cabe recordar que el edificio salió a subasta por un valor de 1,7 millones de euros y quedaba desierto, de forma que la Sociedad Estatal dejaba el inmueble a la venta de forma directa y en estas está ahora.



Usos
De momento todo lo que se sabe de las pretensiones municipales es que se contempla casi un millón de euros para la posible adquisición aunque, según Vázquez, “se va intentar adquirir lo más barato posible” con el objetivo de que “siga siendo un equipamiento público” tal y como se recoge en el planeamiento que se encuentra en vigor, y aunque no se quiere hablar aún del posible uso “hay muchas ideas sobre la mesa” siempre teniendo en cuenta que no fuera otro edificio más de gestión administrativa, es decir, para la colocación de oficinas municipales.



Obviamente, el edificio actual que cuenta con multitud de problemas “sería demolido” y se apostaría por levantar un nuevo edificio que ayudaría “a seguir revitalizando la zona del centro de la ciudad” porque “los vecinos han preguntado en multitud de ocasiones por la situación”.



Ahora toca esperar a que sigan adelante las negociaciones para conocer si finalmente el inmueble pasará a ser propiedad municipal y si, a partir de entonces, cumplen con ese compromiso de escuchar propuestas de los grupos municipales y de los ciudades para este espacio.



Este interés ha resultado toda una sorpresa, a pesar de que lleven tiempo hablando con la sociedad, porque cuando se tramitaba el convenio urbanístico en 2013 que permitía con el nuevo plan general que esta zona dejara de ser equipamiento para ser residencial y terciario, siempre se estimó por parte municipal como un cambio positivo para el Ayuntamiento que se quedaba con el 15% del aprovechamiento urbanístico. Todo a pesar de que entonces estaba aún sin definir la ubicación de la biblioteca central.


Cierto es también que, tras esta aprobación, ya con el actual alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, como edil de Urbanismo se produjo una reunión en Madrid para ver las posibilidades de que parte de la nueva construcción siguiera como equipamiento. Hubo buenas palabras pero nada concreto hasta que se tumbó el nuevo planeamiento y ese convenio urbanístico quedaba más en el aire que nunca.


Ofertas de 1,75 millones mínimo en la venta directa

Mientras se conoce si la negociación da frutos, lo cierto es que la venta directa que hay abierta hasta el 1 de septiembre obliga a presentar una oferta que, como mínimo, sea de 1.756.100 euros que es el valor por el que arrancó la subasta.


Eso sí, en respuesta parlamentaria al PP la sociedad se abre a “otras posibles actuaciones” si se cierra este procedimiento sin haber conseguido enajenar el inmueble tal y como esperan.



Temas relacionados

para ti

en destaque