La Espina, el nuevo restaurante que irrumpe en Almería y conquista paladares desde su apertura
De la mano de Antonio Ortuño y con tan solo unas semanas de vida, este cuidado establecimiento busca seguir creciendo gracias a su interesante propuesta

La Espina, llena hasta la bandera, en la noche de su inauguración.
Mimando cada detalle, cada plato y cada experiencia. La Espina, el nuevo restaurante del conocido cortador de jamón Antonio Ortuño, ha irrumpido con fuerza en la oferta gastronómica de Almería en apenas unas semanas desde su inauguración. Lo ha conseguido gracias a una cuidada propuesta que busca, tal y como detalla su propietario, "hacer sentir al cliente como en su propia casa, que no tenga prisa en irse".
Ubicado en la calle Felipe II, este restaurante ofrece una cocina fresca y creativa en un ambiente moderno y cercano. Un proyecto minimalista, pero cálido que aúna lo mejor de la cocina mediterránea con un toque fusión. "Hemos recibido muy buena acogida en estas semanas, estamos muy ilusionados y satisfechos, pero queremos seguir creciendo", confiesa Ortuño para LA VOZ.
El secreto para que La Espina se haya ganado la confianza de los almerienses en apenas unas semanas desde su apertura está en el cuidado de cada detalle. Desde la comodidad de las sillas hasta, por supuesto, una carta con interesantes y deliciosos platos a partir de la mejor materia prima. Una carta que, además de los platos habituales, apuesta por las sugerencias de temporada.

La inauguración de La Espina estuvo llena hasta la bandera.
De croquetas de gamba roja a raviolis de cerdo salvaje
"Tenemos una sección de bocaditos que está funcionando muy bien. Son pinchos especiales como croquetas de gamba roja o de nuestro jamón de bellota que se piden mucho entre los clientes", detalla Ortuño. En esta sección, además, destacan los ravioli de cerdo salvaje con falsa bechamel de consomé y aire de romero, uno de los platos más demandados desde la inauguración.
La especialidad de La Espina, además de hacer sentir al cliente como en casa, es el empleo de la brasa, tanto en carne como pescado. Para conseguir el mejor resultado utilizan madera de encina, una de las mejores formas para conseguir un sabor y aroma a ahumado que conquiste paladares. Desde las mejores carnes, hasta pescados, bocaditos o mariscos, puedes consultar su carta completa aquí.

Ravioli de cerdo salvaje con falsa bechamel de consomé y aire de romero
Más allá de la carta del restaurante, Ortuño y su equipo quieren cuidar la experiencia del cliente, que no quiera marcharse. Por ello, han recuperado una tradición que en muchos restaurantes se estaba perdiendo, la sobremesa: "Nosotros no cerramos por la tarde, no queremos echar al cliente. Tenemos un camarero de guardia para que se quede durante la sobremesa", cuenta su propietario.
Un restaurante, en definitiva, que ha irrumpido con fuerza en Almería con tan solo una semanas de vida, pero que pretende dar mucho más que hablar en los próximos meses. "Ahora mismo estamos al 50% de lo que queremos ser en un año. Queremos crecer mucho más y, gracias a nuestro gran trabajo, vamos a conseguirlo", concluye Ortuño.