“Si se va Alfonso aquí no habrá fútbol”
“Mi afición era ganadora y cuando nos marcaban un gol ella levantaba al equipo”

Los dos Alfonsos unidos por un mismo sentimiento.
"La cosa está muy mal porque nadie quiere la pelota y la afición se desespera con la racha de resultados”, dice una voz autorizada en Almería. Alfonso García Sánchez pasó momentos delicados en sus tiempos de presidente pero “ninguno como el actual ya que el equipo se ha metido en una espiral muy peligrosa”.
No tiene una receta mágica para salir del pozo y le pide a la afición que “no abandone al equipo en este momento tan delicado porque no son tan malos”.
Sin recambio
El presidente más laureado de la Agrupación Deportiva Almería no tiene recetas mágicas pero “les tengo que dejar claro a todos que si se marcha Alfonso del Almería nos quedamos sin fútbol. Sin el presidente no hay na”, sentencia convencido de ver “unas medidas acertadas y a base de paciencia ya que se juega mucho Alfonso y toda la provincia. “Si perdemos la Liga Profesional sería volver a partir de cero y no veo a Alfonso dispuesto a que esto suceda”.
El entrenador
Alfonso tuvo en Maguregui a un maestro de los banquillos y “me decía que en el fútbol las decisiones hay que tomarlas con paciencia y acertar”, no considera que todo cambie con un nuevo entrenador ya que “a los jugadores en casa les tiemblan las piernas y no quieren la pelota. Contra eso no hay entrenador que valga”.
“Alfonso sabe bien lo que tiene que hacer y no se quedará cruzado de brazos ya que el Almería tiene arreglo a día de hoy”, asegura convencido en ver a los rojiblancos levantar el vuelo ya que “hay futbolistas que están muy lejos de su mejor nivel y pronto van a despertar”.
Alfonso García Sánchez pasó por todo pero “nada que ver con lo de hoy porque esta plantilla es para subir a Primera y no está dando la talla y van 17 jornadas de Liga”.
Hay solución
La experiencia de Alfonso nos ayudará en este momento y la primera receta llega desde la grada. “Si queremos tener fútbol de nivel en Almería hay que estar con el equipo a muerte y levantarlo en los momentos delicados”. Va más lejos y recuerda como en sus tiempos “mi afición era ganadora y cuando nos metían un gol activaba el orgullo de los futbolistas y los hacía volar”. Tiene claro que hay que “perdonar los errores y dar confianza a los futbolistas en casa”.
Queda tiempo
No sabe el grado de alerta que activar “no estoy dentro del club para ello pero les diría a Alfonso y a los jugadores que estamos a tiempo de cambiar la dinámica”. La Liga no ha llegado a su ecuador y “no somos tan malos como dice la tabla y eso nos ayudará acrecer juntos”.