Perdona mi lenguaje del Barrio de Los Ángeles pero es que el partido del Almería en Elche siendo una final me ha dejado muchas cosas claras y que no termino de entender.

Lo primero que quiero dejar claro es que con “media de churros y chocolate” en una mesa te diría que te equivocas con tanto vídeo a los jugadores que los vas a volver locos. Te diría que las charlas para mí que he sido un futbolista penco (palomero goleador) no sirven para nada. No me enteraba de na. Y lo de motivador se disipa cuando no se acierta en la alineación y no hay calidad suficiente para vencer.

Me decía un futbolista muy grande, muy grande, que: “Las charlas y los vídeos no valen para nada. Esto se gana y se pierde en el campo”. Y me lo dijo después de una final preparada durante 15 días y terminó en: “cagada y descendimos por nuestros méritos a Segunda B”.

Lleva el equipo unos cuantos partidos tirando la primera mitad. Lleva el equipo unos cuantos partidos partido en dos y lo peor de todo, Juan Ignacio, es que hay jugadores que no están y no aportan y siguen siendo titulares.

El partido de Elche lo empezó a perder Juan Ignacio al no quitar a Thievy arriesgando con Edgar y por una evitable chiquillada de Michel. Aquí me di cuenta de las carencias de Juan Ignacio como entrenador. No se lo tome a mal Mister, yo tengo muchas carencias como locutor de radio, por eso le escribo con “Media de Churros”.

Seguro que si se tiene que examinar de táctica o técnica (como lo quiera llamar) elegiría un Elche-Almería por ser el club ilicitano “el que más he seguido hasta que llegué al Almería”, dijo en la rueda de prensa y luego preguntas y respuestas sobre: Elche, Elche, Elche...

El Almería que es su club ha entrado en descenso y le tengo que decir que pierdo dos kilos cada vez que hago Carrusel Deportivo de la impotencia que siento. Es una pena, pero no veo mejoría en sus 11 jornadas al frente del Almería. Estamos en un viaje hacia ninguna parte y lo peor es que tengo la corazonada de que no acabará la Liga en el Almería.

Pido a Dios equivocarme pero esto huele a Segunda División y a relevo en el banquillo, pero volverá a salir el sol en el Barrio de Los Ángeles diremos aquello de: “Dame Mediaaaaaaaa”, de churros, Juan Ignacio, de churros.

Perdona que no confíe en los entrenadores, Juan Ignacio, perdoname.