A las cinco de la mañana ya estaban abiertas las puertas de la sede de la Peña Milhojas para servir el desayuno a sus socios, que una hora más tarde se subirían al autocar para viajar a Sevilla. Ya que el madrugón era inevitable, la directiva decidió abrir para que la afición se marchara con las pilas cargadas. Desde principios de semana ya estaba completo el primer bus, y el segundo estuvo a punto de salir también, pero no se llegó al mínimo de plazas.

Tostadas, café... La sede, que aún no está inaugurada, recibe cada día la visita de muchísimos socios, y ayer, los más de cincuenta aficionados que se apuntaron al viaje de Sevilla, desayunaron tostadas y dulces con café en mesa. José Luis López, presidente, se quedó en Almería para coordinar las operaciones de una jornada en la que el Almería jugaba a las cinco, y debía dar tiempo a servir la comida al mediodía y prepararse para la tarde.
Mónica Ruiz pasó lista y pasadas las seis, el autocar de Milhojas ya estaba rumbo a la capital hispalense. Con Basora ocupando, como en todos los desplazamientos al ser uno de los más queridos por los viajeros, las primeras butacas junto a su esposa, y la parte trasera con aficionados llegados desde Vícar, la diversión es inevitable en los desplazamientos.

El viaje Con primera para en Loja, para desayunar, a las 8 de la mañana. Mónica y Juan, ya en el autocar, pasaron lista para recoger el dinero de las entradas, que se retiraron en las taquillas del Pizjuán, y de la porra habitual de los desplazamientos. Las 54 plazas se completaron y ya en Sevilla, dio tiempo a darse una vuelta por la ciudad antes del partido.
Milhojas ya está trabajando para el viaje de San Sebastián, en el que se hará noche. El día  de salida se cerrará en cuanto la LFP haga oficial el horario. El precio será económico para los aficionados.