La primera semana de venta de abonos se cerró con el listón colocado cerca de los 12.000 pero sin alcanzar una cifra que igualaría los registros de la primera temporada del equipo en la máxima categoría con la actual denominación. Llegar a los doce mil lo da por hecho el presidente del Almería que no se muerde la lengua cuando habla a aquellos que solo irán al campo para ver al Real Madrid o al Barcelona. Para ese día habrá pocas localidades en taquilla y su precio va a superar los 200 euros, más cara una entrada que un abono.
En la sede se han acabado las colas que solo aparecen por la tarde cuando muchos dejan de trabajar y aprovechan la última hora de apertura para  conseguir un lugar en el Estadio Mediterráneo. Ya no quedan butacas libres en Fondo y Preferencia y Tribuna es lo que se despacha.
Con los precios de 550 y 400 para adultos se siguen despachando abonos a aquellos aficionados que vuelven.